El personal médico del penal, instruye constantemente a los reclusos sobre la prevención del virus.
En la últimas horas se confirmó el segundo caso de viruela del mono en el Magdalena, por tal razón los protocolos de bioseguridad en los diferentes centros carcelarios incrementaron.
Así lo confirmaron las directivas de la cárcel Rodrigo de Bastidas en Santa Marta, quines luego de conocer el primer caso, implementan estrategias para reducir el riesgo en el personal privado de la libertad.
“Estos protocolos van encaminados a implementar medidas de prevención la trasmisión del virus, como son: el lavado de manos, distanciamiento físico y el uso de los elementos de protección personal, en toda la comunidad penitenciaria y carcelaria”, expuso Yair Manjarrés, director del penal.
Entretanto, el personal médico de la cárcel, también realiza actividades de concientización con los reos para que conozcan más sobre las formas de transmisión de este virus.
“Se están realizando diagnósticos a enfermedades asociadas a la viruela símica como la varicela, el sarampión, las infecciones bacterianas de la piel, la sarna, la sífilis y las alergias medicamentosas, todo esto para tratar de anticiparnos a cualquier contagio o enfermedad que se pueda presentar al interior del establecimiento carcelario”, puntualizó.
Es preciso indicar, que las visitas conyugales y familiares se estarían desarrollando bajo estrictos protocolos, para evitar que el personal externo ingrese el virus al centro carcelario.
Finalmente, desde la cárcel Rodrigo de Bastidas invitan a la comunidad que se abstengan de realizar alguna visita en caso de presentar algún sintoma o malestar asociado a la viruela símica.