Un perrito ciego cayó en un enorme hueco lleno de aguas residuales en la urbanización Villas de Alejandría, lo que despertó la preocupación de la comunidad que asegura vivir entre fétidos olores y riesgos constantes para niños y adultos.
La mañana del miércoles, una familia de la urbanización Villas de Alejandría vivió momentos de angustia cuando descubrieron que su mascota ciega había desaparecido. Tras una intensa búsqueda, el animal fue hallado en el fondo del mismo cráter de casi dos metros de profundidad en el que el pasado domingo cayó un camión cisterna.
La familia, al percatarse de la situación, llamó a los bomberos, quienes lograron rescatar al perro con vida. El hecho sorprendió a todos, ya que pese a la fuerte caída, el animal resultó ileso.
Temor por la seguridad de la comunidad
El incidente despertó una gran preocupación en el sector, pues los vecinos temen que mañana no sea una mascota sino un niño el que pueda caer en el hueco. El cráter permanece abierto desde hace varios días.
La convivencia con olores insoportables
Además del riesgo físico, los residentes denuncian que de este hueco emanan fuertes olores a aguas residuales, lo que hace insoportable la vida en la zona.
“Es imposible vivir así, los olores se encierran en las casas, incluso en las habitaciones con aire acondicionado. Todos terminaremos enfermos”, aseguró una vecina del sector, visiblemente indignada.
Vecinos aseguran que no pueden seguir expuestos a un foco de enfermedades ni al riesgo constante de que otra persona, especialmente un niño, sufra un accidente en el lugar.
