Las casas quedaron sin techos y con grietas en puertas y ventanas.
Residentes de Santa Barbará de Pinto vivieron una madrugada de terror, luego de que el pasado jueves un vendaval los sorprendiera mientras dormían.
Cerca de 45 viviendas de los barrios Nuevo Horizonte, San José y Pinto Viejo quedaron destechadas, producto de los fuertes vientos que se presentaron.
La Alcaldía Municipal y el comité de Gestión del Riego, adelantan censos para determinar el número de familias y viviendas afectadas.
“Vivimos momentos de pánico. La brisa levantaba los techos de las casas, pensaba que nos iba a llevar. Fue horrible”, expresó una ciudadana.
Por fortuna no se presentaron víctimas fatales con el fenómeno natural.