Se ofreció un espacio seguro, cómodo y con todos los recursos necesarios para que los estudiantes se prepararan adecuadamente para sus compromisos académicos, mediante dos jornadas especiales de 24 horas en la Biblioteca Germán Bula Meyer.
Estas jornadas, realizadas del 18 al 25 de septiembre y del 15 al 20 de octubre de 2024, proporcionaron a los estudiantes un entorno propicio para el estudio, con el objetivo de apoyarlos en sus compromisos académicos, especialmente a aquellos que residen en pensiones y enfrentan dificultades para concentrarse en sus lugares de alojamiento.
El director de la Biblioteca, ingeniero magíster Julio Alberto Vega Baquero, señaló que la iniciativa surgió del compromiso de la Institución con el bienestar de sus estudiantes “La Biblioteca abrió sus puertas 24 horas para que los estudiantes vinieran y estuvieran cómodos, con mobiliario ergonómico, buena iluminación y acceso a todas las colecciones bibliográficas”, destacó Vega.
Durante ambas jornadas, los estudiantes pudieron disfrutar de un lugar cómodo y con acceso a todos los recursos tecnológicos y bibliográficos disponibles.
Se pusieron a disposición computadores portátiles, estaciones de agua y café, y personal de servicio y vigilancia para garantizar la seguridad y comodidad de los usuarios.
Para quienes ingresaron después de las 9:00 p.m., fue necesario presentar el carné estudiantil, con el fin de asegurar un control adecuado en el campus.
“Contamos con el personal de vigilancia habitual y recomendamos a los estudiantes que permanecieran en la Universidad hasta las 6:00 a.m. para evitar cualquier contratiempo fuera de la Institución” añadió Vega.
Johany Fonseca Acuña, estudiante de sexto semestre del Programa de Licenciatura en Matemáticas, resaltó la importancia de las mejoras en los recursos académicos brindados por la Universidad “Pienso que son de gran ayuda para mí como estudiante, ya que puedo dedicar más tiempo a estudiar y estar atenta a mis estudios“.
Por su parte, Santiago Latorre Costante, estudiante de octavo semestre del Programa de Ingeniería Industrial y usuario frecuente de la Biblioteca, compartió su perspectiva sobre la importancia de estas jornadas.
“Estas jornadas de atención son fundamentales para nosotros. Nos permiten estudiar con tranquilidad y prepararnos mejor para las evaluaciones. La Biblioteca ofrece un entorno seguro y recursos que no siempre tenemos en casa, como libros especializados y acceso a internet para investigaciones“.
La Alma Mater planea continuar con este tipo de iniciativas, buscando siempre ofrecer las mejores condiciones para el desarrollo académico de sus estudiantes.