A las 9 de la mañana se inició en la Procuraduría la lectura del fallo en el juicio disciplinario que se adelanta contra directivos de la Triple A por la ejecución del contrato de asistencia técnica suscrito con Inassa.
Se trata del proceso que se sigue contra Ramón Navarro Pereira, Julia Margarita Serrano Monsalvo y Ramón Heráclito Hemer Redondo, ex gerentes generales de la Triple A.
El Ministerio Público estableció que la Triple A desde el año 2000 venía pagando a Inassa una remuneración derivada del citado contrato, que mensualmente era en promedio de $1.600 millones, lo que anualmente representaba una remuneración aproximada de $19.600 millones, lo que significa que durante la vigencia del contrato ese pago superó los $237.000 millones, equivalentes a acerca de $80 millones de dólares.
El contrato fue suscrito el 31 de marzo de 2000, por Luis Nicolella De Caro, en representación de Inassa, y Francisco Olmos Fernández, de la Triple A, y subrogado por las partes cinco meses después, pactándose su plazo hasta el 19 de octubre de 2033.
“El ente de control revisó la contabilidad de las empresas involucradas en la ejecución del contrato que reposaban en la Triple A, y no encontró soportes ni evidencias que acreditaran que dicha asistencia técnica se estuviere prestando”, advirtió la Procuraduría al momento de iniciar la pesquisa.
El Ministerio Público les imputó a los representantes legales de la Triple A una falta que consiste en “apropiarse, directa o indirectamente, en provecho propio o de un tercero, de recursos públicos, o permitir que otro lo haga; o utilizarlos indebidamente”, la cual fue calificada como gravísima a título de dolo para Navarro y Serrano Monsalvo, y de culpa gravísima para Hemer.