El siniestro ocurrido el pasado 13 de septiembre del 2021, dejó una marca imborrable en los familiares de las víctimas.
Este miércoles, se cumple el segundo aniversario de la tragedia que enluto el sector de Gaira y a toda la comunidad samaria, tras la muerte de seis jóvenes en medio de un aparatoso un siniestro vial.
Pese a todo el tiempo transcurrido, aún permanece vivo el recuerdo de esa trágica madrugada del 13 de septiembre de 2021, cuando el grupo de jóvenes que caminaban por un costado de una calzada y fue arrollado brutalmente por el empresario Enrique Vives Caballero.
Las víctimas quedaron tendidas sobre el asfalto, con politraumatismos y extremidades rotas, lo que les causó la muerte de manera inmediata a 6 de ellos. En el hecho, otro joven resultó herido y logró sobrevivir a las lesiones sufridas.
Es preciso recordar que los fallecidos fueron identificados como Elenoir de Jesús Romero, María Camila Romero Troncozo, Rafaela Josefina Petit Faneite, Laura Valentina de Lima, María Camila Martínez, y Juan Diego Álzate Ordóñez.
En total, cinco familias aún se les hace difícil asimilar, cómo en cuestión de segundos les arrebataron a sus seres queridos.
Los parientes de los fallecidos contaron que, los jóvenes se habían reunido en la noche para celebrar el cumpleaños de uno de ellos. Inicialmente compartieron en un establecimiento público y tiempo después, cuando caminaban con hacia otro lugar, fueron arrollados por Vives Caballero, quien conducía con exceso de velocidad y además se encontraba bajo los efectos del alcohol.
Así fue el proceso judicial que enfrentó Vives Caballero tras el siniestro:
El empresario Enrique Vives Caballero, a lo largo de la judicialización solo en una oportunidad intervino a través de una audiencia virtual, pidiendo perdón a las familias de las víctimas.
Del resto, sus abogados fueron los que dieron la cara en el proceso, buscando la manera de tumbar los argumentos y pruebas que estaban en manos de la Fiscalía.
Finalmente, en menos de un año del accidente, tras reparar económicamente a los familiares de los fallecidos, logró llegar a un acuerdo con la justicia para pagar más de siete años con el beneficio de casa por cárcel.
Además, logró adquirir un permiso de libertad condicional para retomar sus obligaciones laborales.
Su abogado Alex Fernández, insistió en que, en este hecho, ninguno quiso que sucediera la tragedia. Además, que la responsabilidad fue compartida tanto del conductor, como de los transeúntes que estaban en la madrugada atravesados en una carretera nacional con problemas de luminaria y alto tráfico vehicular.
Fernández consiguió que a Vives no se le pudiera comprobar con exactitud el estado de alicoramiento en el que manejaba el vehículo, por la falta de una prueba de alcoholemia de rigor que debió practicar Medicina legal durante los actos urgentes.
Sin sabor a costo de la ‘injusticia’
Para las cinco familias que afrontaron la atroz pérdida, no se hizo justicia en este caso.
Los afectados aceptaron que Enrique Vives no tuvo la intención de causar con su camioneta semejante tragedia, pero también esperaban que le impusieran un castigo ejemplar para enviar un mensaje a la sociedad y evitar que un hecho similar se repitiera y enlutara a más personas. Con el pasar de el tiempo, el sentimiento de inconformidad con la justicia se hizo más grande en las familias, que aseguran que el empresario fue el principal favorecido.
Una indemnización que no llenó el vacío de las pérdidas
Tras un largo proceso judicial, la Fiscalía reveló que los familiares de las seis víctimas fatales, fueron indemnizados con un monto de $1.715 millones que se distribuyó entre todos.
Para desembolsar la reparación económica a cada familia, fue necesario que firmaran una documentación en la que aceptaran que a Vives Caballero, le modificaran la conducta procesal de dolo eventual por la de homicidio culposo que lo beneficiaría con una amplia rebaja de pena, como efectivamente sucedió.
Aunque dicha condición causó inconformidad en padres, hijos y hermanos, debido a que “el dinero no les devolvería a sus seres queridos”, finalmente todos accedieron a llegar un acuerdo para recibir el recurso que les ofrecieron.
