La iglesia católica presentó los protocolos para tener en cuenta en el tiempo de Cuaresma y en la Semana Santa.
Para este año la iglesia católica estableció nuevamente suspender procesiones, viacrucis y el tradicional lavatorio de pies, como parte de las estrictas medidas de bioseguridad para evitar la propagación de la Covid-19.
Dentro de los protocolos de bioseguridad adecuados para la semana mayor, se prohíbe la programación de procesiones o actividades que impliquen desplazamiento de grupos.
El Santo Viacrucis se debe realizar en el templo con el aforo establecido hasta el momento, evitando aglomeraciones y desplazamientos que implique aglomeraciones.
Asimismo, para el domingo de ramos, se deben evitar procesiones con fieles, solo se permitirá presencia del sacerdote y ayudantes, mientras que el resto de feligreses permanecen en sus lugares asignados.
Para la celebración del jueves santo, se omitirá el lavatorio de los pies. Al final de la Misa en la Cena del Señor, la procesión hacia el lugar de la reserva la debe hacer sólo el sacerdote y sus ministros.
Seguidamente, se ordenó que, para la tradicional adoración de la Santa Cruz con el beso solo lo podrá hacer el sacerdote, los demás fieles lo harán desde la distancia con una venia profunda.
Por otra parte, se notificó que el Sermón de la siete Palabras es voluntario.
Finalizando la semana mayor, en la vigilia pascual, en la tradicional noche de la bendición del fuego, solo se permitirá realizarse en el atrio, mientras que los fieles permanecerán en sus puestos asignados, el sacerdote y ministros podrán realizar la entrada procesional.
Los párrocos y feligreses deberán cumplir de acuerdo con el decreto distrital los horarios de los servicios litúrgicos, los cuales serán desde las 6:00 am hasta las 8:00 pm.
