En lo que queda de playa hay gran acumulación de arena con sedimentos vegetales justo al lado de los espolones.
Ubicada al sur de El Rodadero, Salguero era hasta hace poco una de las playas más atractivas de Santa Marta, por su amplia extensión y su blanca arena, pero además porque era propicia para hacer olvidar los malos momentos y reconectar a los visitantes con su paz interior.
Su encanto natural, que inspiraba a los poetas y que atraía a los enamorados, se ha perdido porque el mar dejó de besar la arena.
El acelerado proceso erosivo redujo a la mínima expresión la playa, especialmente en un área que por tradición era utilizada para la celebración de matrimonios civiles.
Y es que hasta hace solo 10 años el mar distaba 40 metros de las edificaciones levantadas en la línea costera, por eso, en un abrir y cerrar de ojos, esta zona del corredor turístico de Santa Marta se convirtió en una de las de mayor potencial de desarrollo inmobiliario y de crecimiento en visitas de turistas.
Muy a pesar de que se han adelantado algunas soluciones duras como son la construcción de espolones, la furia del mar y la erosión costera no se detiene, generando mucha incertidumbre a la comunidad en general.
En un recorrido por Playa Salguero, se pudo constatar algunos estragos del más reciente mar de leva que azotó las costas de Santa Marta. En la orilla hay una gran acumulación de arena con sedimentos vegetales o palizada justo al lado de los espolones.