Por la temporada de lluvia los niveles del afluente han incrementado y tiene en peligro a varios municipios.
Los altos niveles del río Magdalena, producto de la temporada invernal, comienzan a hacer estragos en el departamento del Magdalena; incluso, tiene en jaque a la iglesia del municipio de Tenerife, una edificación declarada como bien de interés cultural de la nación.
Por ello, el alcalde municipal Andrés del Portillo emitió un comunicado de alerta, haciéndole un llamado al Gobierno Nacional para que a través de la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres –UNGRD- intervengan la erosión fluvial que se ha presentado en el municipio, a la altura de la iglesia San Sebastián de Tenerife.
Asimismo, solicitó la presencia de la Gobernación del Magdalena para proteger la estructura y las casas cercanas a la orilla del afluente, antes de que se presente la emergencia.
“Se requiere la inaplazable intervención de los gobiernos nacional y departamental para prevenir el riesgo en que se encuentra dicho inmueble”, dice la misiva.