En un nuevo avance del Convenio 113, Corpamag e Invemar lideraron un taller técnico para fortalecer la prevención, la mitigación y el manejo de las fuentes de contaminación que afectan a la bahía de Santa Marta, donde se evaluaron amenazas, impactos ambientales y posibles soluciones de corto, mediano y largo plazo.
En un ejercicio conjunto orientado a enfrentar la presunta contaminación en la Bahía de Santa Marta, la Corporación Autónoma Regional del Magdalena (CORPAMAG) y el Instituto de Investigaciones Marinas y Costeras (INVEMAR)desarrollaron el último taller técnico contemplado en el Convenio 113, un espacio en el que se revisaron medidas de prevención, impactos ambientales y estrategias para la protección del ecosistema costero.
Durante la jornada, investigadores y entidades participantes identificaron diversas fuentes de afectación, entre ellas las descargas provenientes del río Manzanares, vertimientos directos al mar, actividad turística sin control, derrames de sustancias contaminantes y el rebosamiento de manjoles en sectores críticos de la ciudad.

Estas situaciones, según los expertos, generan impactos significativos como afectaciones a la salud de la población, consecuencias socioeconómicas para las comunidades cercanas y deterioro de los servicios ecosistémicos en zonas de corales, pastos marinos y playas.
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Medidas que serán consolidadas en un documento técnico
El taller también tuvo como objetivo priorizar las acciones más urgentes para enfrentar estas amenazas. Entre las propuestas se encuentran: Actualización del sistema de alcantarillado sanitario del Distrito, Construcción de sistemas de tratamiento para aguas residuales antes de su descarga al mar y la Implementación de infraestructura de drenaje pluvial para reducir rebosamientos y vertimientos.
Un documento técnico consolidará todas las medidas acordadas, el cual se integrará a los productos finales del convenio.
La actividad contó con representantes de entidades distritales, la autoridad ambiental urbana, empresas de servicios públicos, la academia y la Armada Nacional, permitiendo una visión amplia del problema y sus implicaciones en los ecosistemas marinos y en la vida de las comunidades.
Con este espacio culmina la fase de formulación participativa, considerada clave para avanzar hacia la ejecución de iniciativas que buscan mejorar la calidad ambiental y fortalecer la protección de los mares y costas del Magdalena.


