Gran parte de su discurso estuvo dedicado al presidente del Senado, Efraín Cepeda, a quien acusó de hacer “trampa” durante la votación de la consulta popular. “
El presidente Gustavo Petro instaló en Barranquilla su primer cabildo abierto, un escenario que utilizó para señalar directamente a los senadores costeños que, según él, le “hundieron” la consulta popular en el Senado la semana pasada.
(También: Visita del buque ‘Elcano’ dejó más de $2.000 millones como inyección económica a Santa Marta)
Acompañado del ministro del Interior, Armando Benedetti, el mandatario mencionó uno a uno a los congresistas que, a su juicio, le fallaron al pueblo, en lo que muchos interpretan como un “ajuste de cuentas” de cara a las elecciones de 2026.
El listado de senadores “señalados” por el presidente incluye a Antonio Zabaraín (Cambio Radical), Mauricio Gómez Amín (Partido Liberal), Carlos Meisel (Centro Democrático), Honorio Enríquez, Carlos Mauricio Farelo y Efraín Cepeda (Partido Conservador). Petro enfatizó que estos votos no fueron “contra Petro”, sino “contra su propio electorado”.
“Esto tenemos que analizarlo bien entre familia, amigos, con los del barrio, en el sindicato, en las juntas de acción comunal. Solo se puede hacer una de dos: o cambiamos a Colombia o se nos desbarata”, manifestó el presidente.
Gran parte de su discurso estuvo dedicado al presidente del Senado, Efraín Cepeda, a quien acusó de hacer “trampa” durante la votación de la consulta popular. “Él quiere ser presidente, alguien le dijo que Petro iba a caer y que entonces él sería presidente. Se ilusionó con eso y empezó a ‘mamarme gallo’ porque estaba ahí en la mesa de despacho presidencial diciéndome que me iba a ayudar”, afirmó Petro.
No busca reelegirse
En medio de la polémica y las acusaciones, el presidente Gustavo Petro también aprovechó el cabildo abierto para despejar las dudas sobre una posible reelección después de agosto de 2026, cuando finaliza su período de gobierno.
“No estoy pidiendo que vote por tal o cual personaje, no estoy pidiendo que voten por Petro. No me sueño reelegido y no quiero volverme drogadicto del poder porque me volvería asesino, eso no es para mí”, sentenció el presidente, antes de adentrarse en los detalles de la consulta popular.
El cabildo abierto, figura consagrada en la Constitución colombiana como un “mecanismo de participación ciudadana”, busca recoger las opiniones de la comunidad para influir en las decisiones de las autoridades, aunque no tiene carácter vinculante. Benedetti, quien acompañó al presidente en el evento, reiteró que no se busca “incendiar nada”, sino “rescatar los derechos y valores de un puesto decente, un salario decente y digno”, respondiendo a las advertencias de la oposición sobre posibles desmanes en las calles.
“No estamos llamando a una rebelión, ni a un estallido social o actos de violencia. Estamos llamando a que la ciudadanía se exprese con firmeza, de manera pacífica, para que sus inconformidades se conviertan en propuestas que fortalezcan nuestra democracia”, concluyó el ministro.
