En una alocución, el primer mandatario solicitó directamente al Senado reconsiderar su decisión: “No esperamos al año entrante. Le solicito al Senado poner de nuevo en votación la consulta popular”.
Desde China, horas después de que el Senado rechazara su propuesta de consulta popular sobre la reforma laboral, el presidente Gustavo Petro insistió en una estrategia que parece encontrar poco eco en el Congreso: someter nuevamente a votación la iniciativa.
En una alocución, el primer mandatario solicitó directamente al Senado reconsiderar su decisión. “No esperamos al año entrante. Le solicito al Senado poner de nuevo en votación la consulta popular. Y le solicito al pueblo de Colombia, estaré dispuesto a cumplir sus órdenes como jefe de Estado, tomar la decisión contundente como respuesta. Llegó la hora del pueblo”, manifestó Petro.
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A través de su cuenta de Twitter en la mañana de este jueves, el presidente profundizó su estrategia, anunciando su intención de volver a presentar la consulta popular, esta vez incluyendo una pregunta adicional sobre salud. Advirtió que el debate en el Senado se daría “con el pueblo en las calles y carreteras, si así lo deciden las asambleas populares en los municipios”.
Petro anunció la convocatoria a “cabildos populares” en todo el país y llamó a la ciudadanía a movilizarse. “El lunes en el paseo Bolívar de Barranquilla los espero para comunicar la decisión popular. El presidente de la República convoca a toda la población a las asambleas populares municipales, cabildos populares, desde hoy hasta el domingo; allí se debe discutir la decisión a tomar: si aceptamos el fraude o vamos a ejercer el derecho a la huelga general”, expresó el mandatario, reiterando su denuncia de fraude en la votación del Senado y lanzando fuertes críticas contra algunos senadores.
El presidente señaló directamente a la senadora Angélica Lozano por su ausencia en la votación y al senador Iván Name, sugiriendo cálculos políticos detrás de sus acciones.
“La gran pregunta que me hago es si Angélica Lozano abandonó la plenaria y no votó, solo calculando entonces que vendría a ser ella la que podría aprobar la reforma por ley sin pueblo. Muy triste, necesitaron un senador convicto que liberaron para votar contra el pueblo y una senadora pensando en protagonismos y que por eso no fue a votar; así quisieron negar la decisión del pueblo. Esos cálculos salen muchas veces mal. Yo apoyé a Angélica para ser presidenta del Senado en contra de Iván Name. Ahora usan a Iván Name para tratar de hundir la reforma pensional. Ahora usan también a Angélica para hundir la consulta popular y hundir también la ley que presenté para ser discutida en el senado y que ocho senadores de la comisión VII traicionaron”, concluyó Petro, marcando una escalada en la tensión entre el Ejecutivo y el Legislativo.
