Su padre pide ayuda a personas de buen corazón que le permitan darle cristiana sepultura a su ser querido.
Bernardo Mendoza y su familia pide la colaboración a la ciudadanía samaria para poder sepultar a su hijo, Gustavo Mendoza Gámez, quien falleció en la madrugada de este jueves después de sufrir un ataque epiléptico.
El cuerpo sin vida de Gustavo, de 37 años, se encuentra en el piso de la sala de su casa ubicada en el barrio La Victoria (aledaño a la vía al Puerto Marítimo frente el sector de La Paz), sobre una colchoneta a la espera de que pueda ser sepultado.
Según Bernardo, desde los 17 años su hijo venía sufriendo la enfermedad, pero sin recibir ningún tipo de tratamiento médico para combatir las convulsiones que normalmente padecía.
A la causa benéfica se han unido vecinos del barrio, quienes han recolectado parte de los recursos que se necesitan para completar el monto económico de los servicios fúnebres y la construcción de la bóveda en el cementerio de Gaira.
“Ya estamos desesperados porque no sabemos qué hacer, tenemos temor que pueda entrar en descomposición. Somos una familia humilde y Gustavo no sé encontraba afiliado a ningún fondo mortuorio, la verdad es que es bastante difícil”, dijo Bernardo en medio de la tristeza por la muerte de su hijo.
SANTA MARTA AL DÍA conoció en las últimas horas que la misma familia Mendoza se encargó de llamar a la Policía y Fiscalía, para el respectivo levantamiento del cadáver, teniendo en cuenta que Gustavo falleció sin tener un seguro exequial.