Alcides Rodríguez alcanzó su grado como administrador de empresa y su hija como profesional en Negocios Internacionales.
En 2021 Joelys Rodríguez Gamarra acompañó a su padre, Alcides Rodríguez Ramírez, a recibir su título como Administrador de Empresas de la Universidad del Magdalena, después de 26 años de haber ingresado a la institución y de tener que pausar sus estudios para trabajar como mecánico automotriz para poder sostener a su familia.
Dos años después, su constancia y ejemplo, le permitieron a Alcides ver a su primera hija graduarse como Profesional en Negocios Internacionales de esta misma alma mater.
La escena cambió, pero los protagonistas son los mismos. Las lágrimas en sus rostros durante la ceremonia de graduación evocaron los años de arduo trabajo del administrador y su esposa, Mabel Gamarra, que les permitió materializar el sueño de ver a su primera hija con toga, birrete y su título en manos.
“Nos tiene muy felices. Cuando tú estás del lado del graduando es emocionante, pero cuando eres el padre de familia, ese que también ha aportado y ha trabajado duro para que sus hijos se gradúen y logren las metas, uno no tiene cómo describirlo. Si nuestros hijos triunfan, nosotros también triunfamos”, mencionó con emoción el padre.
Aunque no todos los momentos fueron fáciles, Joelys es de las que cree que todo esfuerzo tiene su recompensa y la suya fue lograr convertirse en profesional. “Mi familia ha sido un pilar fundamental durante todo mi proceso para poder llegar a este punto”.
La joven de 24 años se graduó con honores, con una mención de reconocimiento por su trabajo de grado bajo la modalidad de Prácticas de Innovación y Emprendimiento con ‘SmartBook’, una agenda inteligente que nace como una herramienta para ser un apoyo en el proceso de aprendizaje de los estudiantes. Es física, pero tiene una extensión virtual. Esta iniciativa la ha desarrollado junto a su compañero Camilo Laverde, con quien recibió grado y planean seguir trabajando en ella.
“Hemos trabajado muy duro en este proyecto que busca mejorar el proceso de los estudiantes. No solo queremos enfocarnos en la parte académica, sino que también en apoyar su parte emocional, porque sabemos que hay muchos casos de deserción o en los que no se sienten en su mejor momento emocional, así que se busca convertir debilidades en fortalezas”, explica Joelys Rodríguez.
Para Alcides y Joelys, la Universidad del Magdalena siempre será su casa, esa que les ha permitido soñar con un futuro mejor a través de una educación de alta calidad.