¿Qué está pasando en Ciénaga? Esa es la pregunta que se hace la ciudadanía ante los recientes hechos que han alterado el orden público.
Lo que está ocurriendo en Ciénaga tiene a sus habitantes con los nervios de punta. En apenas 48 horas, el municipio ha vivido una racha de hechos violentos que parecen sacados de una pesadilla: robos frustrados, empleados heridos, muertos por violencia intrafamiliar y hasta un intento de quemar viva a una trabajadora de un punto comercial han puesto en jaque la aparente calma de esta población.
El episodio más alarmante ocurrió este martes, cuando un delincuente, al no lograr su cometido durante un intento de atraco, reaccionó de forma brutal amenazando con prenderle fuego a la empleada del local. A esto se suman múltiples robos frustrados en diferentes establecimientos, dejando un saldo dos personas heridas, en su mayoría mujeres, y un caso de violencia intrafamiliar que también ha estremecido a la comunidad. Todo esto, mientras las autoridades aseguran tener presencia activa en las calles.
Como respuesta, la administración municipal decretó medidas urgentes: restricción de motocicletas y ley seca durante Jueves y Viernes Santo. Pero para muchos, estas acciones son un simple “paño de agua tibia” frente a una situación que se desborda y realmente no atacan la problemática de inseguridad en el municipio, y en su lugar terminar afectando a aquellos que practican el mototaxismo como medida de sustento laboral.
La ciudadanía exige soluciones de fondo, presencia real de la fuerza pública y una estrategia contundente que devuelva la seguridad a un municipio que ya no se siente tan seguro como antes. ¿Hasta cuándo Ciénaga vivirá con miedo?
