La afectada fue mordida en el muslo de su pierna derecha.
Lo que debió terminar como una rutina de ejercicios cotidiana para una samaria por poco termina en tragedia, luego de ser atacada por un perro en el Polisur, en cercanías de la terminal de transporte del Distrito.
La fémina responde al nombre de Lisbeth Apreza. De acuerdo con el relato de la mujer, el caso se presentó en la tarde de este miércoles.
“Estaba haciendo mis ejercicios y el perro estaba suelto, sin bozal, pero en compañía de su dueño, cuando de un momento otro el canino se me abalanzo y me mordió en mi pierna derecha en una sola oportunidad, como pude me solté y corrí por mi vida”, dijo la denunciante.
En adición, la mujer aseguró que, el propietario del perro se marchó del sitio sin pedir disculpa y sin inconvenientes.
“Me dirigí hacia el vigilante del lugar para poner la queja y me manifestó que cuando ellos les piden a los asistentes que les pongan el bozal a los perros al ingresar al escenario deportivo, le salen con groserías”, acotó Apreza.
Ante este panorama, la fémina pide mayor control a los encargados de la sede deportiva, para que las personas que arriben al lugar con sus animales no afecten la integridad y la seguridad de los deportistas y samarios.