Los residentes en la parte del sector, manifiestan que el problema de la escasez de agua potable viene presentándose recurrentemente en la comunidad, por esa razón se ven obligados a bajar del cerro para tratar de abastecerse del preciado líquido.
Muchos de los habitantes están programados para esperar a que cada 15 días llegue el agua a sus casas, pero cuando esto no sucede tienen que ingeniárselas para hacer conexiones con mangueras y motobombas al pie de una alberca comunitaria que está construida hace 7 años cerca a la Via Alterna al Puerto.
“Muchas de las casas tienen ese problema arriba, esto es a diario, a nosotros antes nos llegaba el agua dos veces a la semana. A mí me toca a veces comprar el agua, hay muchas personas que pasamos trabajo” Dijo Gledys Fontalvo, residente en la parte alta del barrio.
La alberca de 3 metros de profundidad es el único punto al que se dirigen adultos mayores, niños y amas de casas para coger el agua, la cual no es suficiente debido al gran número de familias que viven en el sector.