Si bien el discurso del alcalde (e) Andrés Rugeles ha estado compuesto por frases como “Rugeles le ruge a la corrupción” y otros mensajes que hablan de escudriñar los presuntos fraudes administrativos en la Alcaldía de Santa Marta; hasta ahora ha sido poco o más bien nada, lo que ha descubierto el designado por Presidencia.
Andrés Rugeles, está en el puesto de Alcalde en calidad de encargado desde el pasado 4 de abril y ha sido cuestionado por su negativa a la hora de responder cuestionamientos de los medios de comunicación; pero también su auto denominación como un “funcionario técnico y no político”, discurso que se contradice cada día más y parece estar hartando hasta el mismo presidente Iván Duque.
Todo parece indicar que hay una tarea, por la que fue mandado Rugeles a Santa Marta y debía hacer en un tiempo determinado y no ha hecho.
Según se conoció por fuentes allegadas al Centro Democrático en Bogotá, Rugeles tenía como plazo el 21 de mayo, para entregar un informe de las irregularidades y presuntos hechos de corrupción al interior de la administración de Rafael Martínez, pero hasta ahora eso sólo se ha quedado en “promesas políticas”.
Pasan los días y lo único que si ha hecho bien Rugeles, es hacer cambios en el gabinete y nombrar como funcionarios, a profesionales que desde Bogotá presuntamente se les estaría ordenando a través del teléfono secreto de Emiro Castro.
Según se ha conocido, el gabinete del gobierno nacional, estaría compuesto por las cuotas de Duque y por las de Marta Lucía Ramírez, entre estas últimas está el Secretario de Transparencia que hoy es Alcalde (e) de Santa Marta; entre esas división, siempre existe el recelo y la discordia por una Marta Lucía que muchas veces se le saltaría la cerca al mismísimo jefe de estado.
En este caso con Rugeles, la designación, habría sido un favor, para tener del lado de la Vicepresidenta con qué pagarles favores a sus amigos políticos en el Magdalena. Esa sería una de las respuestas del por qué nunca se ha visto al senador Honorio Henríquez del Centro Democrático, en el palacio consistorial o en reuniones con el actual Alcalde (e).
Sin embargo las diferencias que puedan tener el Senador Henríquez con Rugeles o los Centro Democrático con los conservadores al interior del gobierno, es otra historia para contar.