El aumento de las ventas de este año es debido a que muchos que comercializaban estos productos ya no están en la ciudad o dejaron este negocio a un lado y se dedicaron a otra cosa.
Las velitas y faroles de colores son una tradición para la noche del siete de diciembre y pese a la pandemia los samarios salieron desde temprano a conseguir estos elementos que adornaran la primera festividad de fin de año.
Los vendedores del mercado público le contaron a Santa Marta Al Día que las ventas de este año están mejores pese a la pandemia de Covid-19 que se presenta actualmente.
“Las personas están comprando desde temprano y se ve mucho movimiento por este sector, si sigue así por la tarde no tendré los faroles que dispuse para la venta”, dijo el vendedor de faroles José Durán.
Muchos de ellos afirman que el aumento en las ventas de este año es debido a que muchos que comercializaban estos productos ya no están en la ciudad o dejaron este negocio a un lado y se dedicaron a otra cosa “Las ventas están por lo alto gracias a que muchos vendedores ya no están, solo quedamos algunos pocos y la mucha demanda de los samarios hace que nos vaya bien”, expreso Wilfrido.
Sin embargo, existen otros vendedores que registran mala venta este año “la cosa ha estado floja a comparación de otros años que la gente madrugaba porque al medio día ya no había faroles por las calles, esperemos que mejore la cosa y se pueda vender toda esta mercancía”, explicó otro comerciante de la zona del mercado.
Por el momento, las autoridades solo reportaron el decomiso de unas ‘chispitas mariposas’ y anuncian continuar con los operativos en este sector para que todo transcurra con normalidad y no se genere la venta de pólvora.
Asimismo la invitación de estos comerciantes es que se acerquen al Mercado Público y compren las velitas y los faroles para hoy siete de diciembre, con el objetivo de que no se pierda esta bonita tradición de fin de año.