Dos muertes de turistas que ingresaron a sus piscinas, se han registrado en menos de un mes.
Sin duda uno de los hoteles de mayor prestigio y certificaciones internacionales en materia de turismo como la ‘Bandera Azul’, es el hotel Zuana, el que por años ha sido orgullo de los samarios, pero que enfrenta un duro panorama a causa de dos tragedias que tocaron la puerta de dos familias, que tuvieron contacto con el establecimiento.
Los casos son los de una niña santandereana de 10 años y el de un turista bogotano de 27, hechos que lideraron las portadas de los diarios, los titulares en los periódicos digitales y las noticias en radio y televisión.
A pesar de que en el caso de la menor, el Instituto Nacional de Salud y la Secretaría del Salud en Santa Marta, a cargo del médico Jorge Bernal, descartó que exista riesgo de contraer alguna bacteria en las piscinas del hotel.
La familia de la menor, relató que visitaron Santa Marta para disfrutar, pero dos días después, la niña comenzó a experimentar dolores de oído, fiebre y otros síntomas. Aunque el diagnóstico inicial sugirió una otitis o infección del oído, al regresar a Bucaramanga, la condición de la niña empeoró gradualmente.
Sin embargo, los problemas llegaron después, una vez pisaron suelo bumangués. La menor comenzó experimentar dolor en uno de sus oídos, acompañado de vómitos y fiebre. Los síntomas fueron inicialmente tratados como una otitis, según su madre, Tatiana González a la revista Semana.
Y aunque la supuesta afección comenzó aparentemente a disminuir, tres semanas después las complicaciones vendrían más severas.
A pesar de ser activa, no quería levantarse de la cama, se veía afectada por la luz y solicitó ayuda para ducharse. En el baño, Stefania sufrió convulsiones, dijo la madre.
Estos inusuales comportamientos alarmaron a su familia por lo que fue ingresada a un centro asistencial. Allí permaneció hospitalizada durante 24 días.
A pesar de los esfuerzos de los médicos por tratar su afección, que al principio no era clara, fue declarada con muerte cerebral y tan solo dos días después de esto falleció.
La muerte de Stefania fue ligada a una meningitis, sin embargo, el Instituto Nacional de Salud, INS, se apersonó del caso y así comenzaron los estudios para determinar la verdadera causa.
Tras un mes de análisis, los expertos determinaron que la verdadera causa fue una encefalitis, enfermedad que se caracteriza por la inflamación del cerebro.
El caso más reciente
Nicolás Moreno Panesso, de 27 años, quien estaba de vacaciones en el hotel Zuana, también falleció luego de entrar a la piscina.
Según testigos, el joven entró a la ‘alberca’ y segundos después de desplomó y murió, por lo que fue sacado por el personal del hotel, quien aplicó el protocolo de primeros auxilios. Panesso fue trasladado a una clínica cercana, pero no lograron salvarle la vida.
Sobre esto, la familia ha solicitado que se adelante una investigación. Mientras tanto, las directivas del hotel se han pronunciado respecto a los dos hechos, el de la niña de 10 años y el del joven bogotano.
Fabio Humar, vocero del Hotel Zuana, aseguró que los casos no guardan relación directa con la piscina o instalaciones del hotel, “La razón: el tiempo que ha transcurrido entre uno y otro descarta cualquier eventualidad. En segundo lugar, y me refiero al primer caso de la niña -y esto tenemos que ser totalmente claros y precisos-, el hotel cumple con todos los estándares de limpieza, aseo y mantenimiento de sus piscinas, es obvio porque de lo contrario no estarían abiertas al público”.
“Los análisis que se han realizado a las piscinas permitan afirmar que cumplen con todos los requisitos para operar y estar abiertas al público. Por supuesto que nos solidarizamos y expresamos nuestros sentimientos de pesar para con la familia de la menor, pero de ninguna manera hay una relación entre los dos eventos”, indican desde la junta directiva del hotel.
Explicó que la muerte de Nicolás sucedió en segundos y fue súbita; y la muerte de la menor, que todavía es objeto de investigación, “no conocemos los resultados. Sucedió en el transcurso de varias semanas no hay ninguna relación y en eso queremos ser totalmente reiterativos y claros”.
“En el caso de la menor tenemos entendido que hay una investigación en curso. Nosotros no sabíamos eso. Por supuesto estamos atentos a cualquier requerimiento que la justicia haga no sólo la penal, sino la administrativa, la Procuraduría u otras entidades del Estado. Sobre ese caso, no tenemos ninguna información. Hemos tenido un contacto apenas somero con la familia de la menor, pero no tenemos ninguna información de avances de la justicia y por supuesto si hubiera una investigación que compete al Zuana, nosotros estaremos atentos y prestos a colaborar en lo que se requiera”.
Sobre la posible vinculación al proceso, una citación a rendir cargos se indicó que, “no hemos sido citados y estamos atentos a cualquier situación que la Fiscalía haga y por supuesto la atenderemos y atenderemos cualquier otro requerimiento en el caso”.
El Distrito investiga
Según se pudo conocer, la Secretaría de Salud, la Fiscalía y la Procuraduría se viene adelantando una investigación.
Desde la Secretaría de Salud, se solicitó muestras de agua de las piscinas.
“Sí. Entendemos que miércoles (27 de diciembre) la Secretaría de Salud de Santa Marta tomó unas muestras. Estamos seguros de que las muestras darán los mismos resultados que han dado las muestras que de manera privada y muy habitual toma el Zuana, como la ley ordena. Todas las muestras de agua que se han tomado hasta ahora han salido de manera pulcra como corresponde y es por eso que el hotel sigue prestando sus servicios”, precisan desde el hotel.
