Cuenta la historia la existencia de comunidades humanas, de disímiles engendramientos, que superaron sus barreras idiomáticas, culturales y sociales; de ésa forma se convirtieron en una multiculturalidad nacional y se dieron normas civiles para convivir en paz.
En la búsqueda de formas alternativas mas avanzadas que expresen sus pensamientos y para encontrar nuevas formas de relaciones, los humanos ponen a prueba sus diversos orígenes y sus culturas; hacen uso intensivo de las tecnologías, hablan diferentes idiomas, conocen gran parte del mundo, están vinculados a instituciones de educación de países distintos a su lengua nacional, con altos estándares internacionales.
La nueva generación, los milenians, no tienen las conversaciones personales que todos tenemos, así que creo que sus mentes corren un poco más rápido y éso las separa del resto de nosotros.
Sus relaciónes son simétricas, no tienen complejos, ni reconocen dignidades premodernas; sus diálogos tienen múltiples contenidos, van desde la música, la pintura, el diseño, la innovación, los libros de lectura, el cine; sobre los acontecimientos de este mundo inestable y sus actividades en la redes, su nicho de análisis, es profundamente post-social.
Establecen vínculos con las causas de los marginados de la globalización y de la macroeconomía nacional y territorial; se comprometen de verdad con la raíces de la problemática internacional, su tradición es la de la Francia insumisa y la de la cultura americana de la inobediencia.
Están esperando terminar su ciclo educativo, una para saltar el charco y continuar sus estudios superiores; la otra espera ubicarse en la fuente de la cultura musical americana. Son unas privilegiadas, gracias a la tenacidad, el trabajo y el sacrificio de sus padres.
La niña de origen hindú, tiene su expectativa de vida, en la música clásica, en especial, desea ser una virtuosa en piano, la que posee origen nacional, ha tenido la opción de vivir y empezar sus estudios en la escuela francesa, y en la isla, que llaman la estrella solitaria del gran Caribe.
Cruzar el charco, para seguir adquiriendo conocimientos en una de las principales, instituciones de educación superior de la vieja Europa es su propósito, para éso debe desarrollar grandes capacidades, por ello tiene que leer y estudiar “Las Bodas de Sangre”, de Federico García Lorca, “Des Cannibales”, de Michel de Montaigne, el “Moderato Cantabile”, de Marguerite Duras y “L Etranger”, de Albert Camus, para obtener una cultura literaria, política y social cualificada.
Miro con una cierta preocupación, que ellas tengan las grandes oportunidades del mundo, mientras el resto de la manada de su edad, se quedan solos en el intento de arrancar un pedazo de intención, y continúen en la batalla por la subsistencia; de esta emanarán la desigualdad, la discriminación y los futuros conflictos.
El próximo escenario de ellas, esta por fuera de las fronteras nacionales, su habítat será el espacio cosmopolita, en el que las barreras del idioma desaparecen, sus lugares de nacimiento poco importan, sus relaciones harán parte del capital social global; sus capacidades serán el paradigma que las guiará, no tendrán que recurrir a los viejos modelos de la cultura política tradicional.
Éstas jóvenes ven el mundo como su gran oportunidad, no le temen a nada, ni a nadie, son irreverentes por naturaleza; poco les importan los tradicionales cánones de la vida convencional, como por ejemplo ver televisión, escuchar emisoras o asistir a liturgias medievales y oscuras de antiguas y decrépitas capillas; su mundo se encuentra en las redes y en las tecnologías de la información y las comunicaciones, pero sobretodo confiarán en la invencibilidad de sus sueños universales.
Asistimos de la mano de ellos a un cambio de época, esto tiene una importante trascendencia histórica, para las generaciones que vienen, y para el nuevo mundo que estamos empeñados en construir entre todos.
Gracias totales sigue esparciendo, el virtuoso de los sueños.
Aadolfobr.