Durante la imposición de banda a la Reina Anfitriona de la Fiesta del Mar, el alcalde (e) Andrés Rugeles no se le arrugó a bailar, por el contrario, fue quien pidió a la soberana acompañarlo en una melodía.
Azotando baldosas, el Alcalde (e) demostró que a pesar de no ser un tigre bailando, no se le arruga al paso y por el contrario también le “ruge” al aburrimiento.
Rugeles Pineda sorprendió al pedir a la anfitriona, Patricia Hurtado Dávila “ahora que la reina baile con el cachaco”.
La gobernadora del Magdalena, Rosa Cotes; no se quedó atrás y como buena samaria, mostró lo suyo al ritmo de canciones del folclor Caribe.
El entusiasmo de los mandatarios dejó entre los asistentes, una sensación que, en comunión, se podrán vivir una grande Fiesta del Mar, que este año llega a sus 60 años.