El joven falleció cuando era atendido en un hospital. Familiares y Policía entregaron diferentes versiones.
Versiones encontradas se conocieron después de la muerte de Daniel Revelo, un joven de 23 años que tuvo algunos encuentros negativos con miembros de la Policía quienes lo requirieron junto a otros jóvenes por encontrarse consumiendo bebidas alcohólicas en un sitio público e infringiendo el toque de queda que rige en todo el departamento de Nariño.
Las dos versiones, de familiares y de la Policía, coinciden en que el joven no portaba su cédula y que se habría negado a ser conducido a la estación de Policía provocando algunos enfrentamientos con los miembros de la Policía, quienes terminaron por llevarlo a la sede de la institución en medio de algunos disturbios protagonizados por otros jóvenes.
Sin embargo familiares del señor Revelo explicaron que fue objeto de agresiones verbales y físicas por parte los policías que estaban de turno.
“Lastimosamente mi primo falleció a consecuencia de una muerte cerebral producto de un trauma craneoencefálico que fue generado por múltiples golpes que le propiciaron miembros de la Policía Nacional”, explica una familiar del joven que pidió mantener su nombre en reserva.
La muerte generó la protesta de varios jóvenes que se reunieren en días posteriores e increparon a los miembros de la Policía, convirtiéndose en nuevos hechos de violencia que derivaron en agresiones entre la comunidad y la fuerza pública que usó granadas de aturdimiento y bombas lacrimógenas para evitar desmanes.
La administración municipal, decidió decretar un toque de queda adicional para apoyar las acciones de control.
La versión policial entre tanto, indica que Daniel Revelo tuvo actitudes agresivas contras los miembros de la Policía y en el estado de embriaguez en el que se encontraba fue trasladado a la estación como medida de protección, sin embrago presentó un cuadro médico que obligo a su traslado a a un centro de salud.
“El pasado 20 de junio a las 6:30 de la tarde uniformados de estación Cumbal generan un traslado de protección a un joven de 23 años, el cual según información preliminar, se encontraba consumiendo bebidas embriagantes, en alto grado de exaltación y agresividad contra las autoridades, ya en horas de la mañana del 21 de junio los uniformados intentaron despertarlo pero el joven registraba signos vitales débiles e inmediatamente fue trasladado al centro de salud mas cercano, donde fue diagnosticado que se encontraba intoxicado”, explicó el coronel Alfonso Reyes, Comandante Operativo de la Policía en Nariño.
Por ahora, se conoce que Revelo fue trasladado a Ipiales para su atención especializada y falleció en medio de la polémica y nuevas protestas de la comunidad contra la Policía, que se repitieron el día de ayer cuando el cuerpo del joven Revelo llego a su municipio natal para las honras fúnebres. Se espera que las autoridades respectivas asuman la investigación para esclarecer este lamentable hecho.