La llegada de la Superintendencia Nacional de Salud, más que dar respuestas sembró un cúmulo de interrogantes. El disgusto entre Caicedo y Aristizábal, está lejos de dirimirse.
La visita de Fabio Aristizábal, superintendente de salud, a Santa Marta para iniciar el proceso de intervención al hospital universitario Julio Méndez Barreneche (HUJMB), dejó un disgusto en el gobernador, Carlos Caicedo. El encuentro entre los funcionarios originó más interrogantes que respuestas.
Lea también:
De acuerdo con Aristizábal, su misión consistía en anunciar la recuperación fiscal del centro médico por parte de la entidad nacional, toda vez que en auditorias previas hallaron 59 presuntas irregularidades. Anotaciones económicas, procesales y disciplinarias fueron endilgadas a la administración del antiguo gerente, Tomás Diazgranados Casadiego.
De octubre a diciembre de 2019, la Supersalud develó un presunto desfalco por el orden de los $21.247,3 millones por concepto de servicios de salud prestados que no fueron facturados, así como también deudas de $2.329,1 millones con la DIAN. Estas y otras falencias aparecieron en el informe final.
En cabeza de la exgobernadora Rosa Cotes, como presidente de la junta directiva, la rectoría del HUJMB presentó unas supuestas anomalías que comprometían los recursos del Estado. El órgano nacional también analizó el desbordado listado de órdenes de prestación de servicio, las cuales eran 939, significando un egreso mensual de $2.514 millones de pesos.
Todo indica que Diazgranados celebraba estos contratos con el objeto que las personas cumplieran funciones públicas que requerían dedicación de tiempo completo y subordinación.
La nómina de especialistas que pagaba la empresa de salud, además de ser alta, también le generaba sospechas a la Superintendencia, pues, de 38 profesionales consultados, solo 15 contaban con la actualización de la especialidad, tal como lo exige la ley. O sea, los médicos atendían a los pacientes sin haber actualizado sus conocimientos.
Por su parte, la gestión para recuperar la cartera de la entidad fue otro cuestionamiento para el saliente Gerente. $8.463 millones eran adeudados por Comparta EPS, Comfacor EPS, Emdisalud EPS, Gobernación del Magdalena y Secretaría de Salud distrital.
“¿TODO CAERÁ POR SU PROPIO PESO?”: EXGERENTE DEL HOSPITAL.
Tanto para Carlos Caicedo como para Tomás Diazgranados, en el trasfondo de esta coyuntura médica y mediática, existe unos raros intereses políticos. El Gobernador alega que Aristizábal es un encomendero del tradicionalismo político del Magdalena, mientras el exgerente asegura que lo quieren tomar como ‘chivo expiatorio’ en medio de una pugna de actores omnisciente.
“La intervención de la Supersalud al HUJMB, es una decisión autónoma y propia de sus funciones. La aceptamos más no la compartimos. Estaremos prestos a acudir a las instancias pertinentes a dar las explicaciones sobre nuestro actuar como funcionario público en un marco de garantías procesales establecidas para tal fin”, aseguró Diazgranados.
Por otro lado, el saliente administrador niega que el pasivo de la empresa haya crecido, según recibió la institución con $52 mil millones de pasivo y la entregó con $44 mil millones a corte del 31 de marzo del 2020. Y aseguró que faltó el ingreso de la totalidad de estampillas que, a su juicio, fue retenido por el mandatario departamental.
“Es absolutamente falso que se quedaron debiendo 4 o 6 meses. Se logró cobrar títulos de embargos a la alcaldía que nunca habían querido cancelar. Los “hallazgos” mencionados en muchas ocasiones, dentro del escenario del debido proceso, fueron respondidos proponiéndose un plan de mejoramiento como fueron siempre las condiciones de las más de 7 visitas realizadas por la Super en nuestra administración”, agregó el galeno.
La verdad histórica del caso, reflejada en los 59 hallazgos, piden respuestas no solo al Diazgranados sino al mismo Fabio Aristizábal, pues, si el panorama descubierto a finales del 2019 y ventilado en marzo de este año vaticinaban una debacle financiera ¿Por qué no se intervino de inmediato, sino que se dio un compás de espera a la saliente administración?
“¿POR QUÉ NO LO INTERVINO CUANDO LO DESANGRABA LA CLASE POLITIQUERA DEL MAGDALENA?”: CARLOS CAICEDO
El careo con el Superintendente fue el escenario para el desahogo de Caicedo, quien aseguró que las 2 últimas intervenciones del ente nacional en la ciudad han sido para ceder terrenos a la clase política tradicional. Aseguró que detrás del HUJMB y la ESE Alejandro Próspero Reverend, se ocultan los intereses de Congresistas, en especial el senador Honorio Henríquez.
“¿Por qué no hizo la intervención cuando los Díazgranados estaban al frente del hospital?, ¿Por qué no lo hizo antes, cuando las familias tradicionales desangraban el departamento? Llega como si fuera un emperadorcito o un reyezuelo. No sea politiquero”, dijo el gobernador Caicedo.
Lea también:
Para el líder político, esta intervención responde a intereses de una colectividad política antiprogresista y antiizquierda. Caicedo Omar asegura que Aristizábal procedió en este momento porque las riendas del Hospital estaban en sus manos y cuando ya se habían hecho inversiones en el marco de la pandemia.
EL RECHAZO DE LA BANCADA ALTERNATIVA Y DEL COLEGIO DE MÉDICOS
Diferentes sectores alternativos y sociales que integran la gran Convergencia Democrática del Magdalena, volcaron su apoyo a la no intervención del Julio Méndez Barreneche por parte del Superintendente Nacional de Salud, a quien acusan de ser alfil del uribismo y del radicalismo de derecha.
“El propósito de la intervención es solo servir a los clanes politiqueros del uribismo y de los Cotes en el Magdalena, que pertenece a la comisión séptima del Senado, tales como: Álvaro Uribe Vélez, Honorio Henríquez Pinedo, Fabián Castillo y Eduardo Pulgar, quienes solicitaron dicha interventoría en el Hospital”, especifica un comunicado.
Asimismo, el Colegio de Médicos del departamento también desaprobó la intervención, aduciendo que en la ciudad los precedentes de otras auditorias de la Supersalud no han sido ventajosos para pacientes, verbi gratia, Salucoop.
La historia no tendrá pronto un desenlace. Luis Óscar Gálvez, toma los destinos de la entidad hasta que se logre la recuperación financiera. Los magdalenenses esperan que esta transición administrativa no afecte a los más de 21.800 usuarios que son atendidos en el HUJMB, y también a aquellos que por el Covid-19 requerirán asistencia en este centro.
