Se trata de Joel Díaz, de 40 años, quien murió cuando intentó salvar el carrito en el que vendía helados y bolis por el suroccidente de Barranquilla.
Según medios de comunicación del Atlántico, Díaz era soltero, no deja hijos y residía en el barrio Evaristo Sourdis, también en la zona suroccidental de Barranquilla. Su cuerpo fue identificado este martes en Medicina Legal.
Aunque era barranquillero de nacimiento, Joel se crió en La Dorada, Caldas, pero había regresado a su ciudad hace más de una década y desde entonces se ganaba la vida como vendedor ambulante.