Detrás de la muerte de John Javier Jiménez Herrera, arrollado por un carro particular y luego por un articulado de Transcaribe el lunes en la noche, hay otra historia que apenas se conoce.
Según sus familiares, John Javier, quien se ganaba la vida como cotero en el Mercado de Bazurto, huía de un sujeto apodado ‘el Soldadito’ que lo perseguía con un machete para que le diera el dinero que había ganado durante el día.
Fue así como el cotero corrió por los pasillos de la central mayorista hasta salir a la avenida Pedro de Heredia. En su afán por escapar de ‘el Soldadito’, cruzó la carretera con dirección a su residencia, pero un carro lo alcanzó, golpeándolo y arrojándolo hacia el carril exclusivo de Transcaribe.
Testigos cuentan que la víctima intentó levantarse por su propia cuenta, pero fue atropellada por el articulado de Transcaribe, que lo mató en el acto. John Javier también era vendedor ambulante. Su zona de trabajo era el Mercado de Bazurto. Allí se le veía desde temprano hasta caer la tarde. El lunes, luego de terminar su jornada laboral, llegó a su vivienda en la calle 41 del barrio La Esperanza, pero en vez de descansar, decidió regresar a Bazurto para tomarse unos tragos.
Estando ahí, a eso de las 9 de la noche, los presentes fueron testigos de una persecución que minutos después le costó la vida al vendedor.
“‘El Soldadito’ lo correteó con un machete y él -John-, buscando escapar, se cruzó la vía a toda velocidad. Un carro lo golpeó fuerte que lo mandó al carril de Transcaribe y el articulado lo atropelló”, manifestaron algunos de los testigos.
Esta versión fue la misma que entregaron los familiares de la víctima. “Ese hombre le quería quitar su dinero y mi hijo corrió para escapar del ataque y fue atropellado por un carro. Cuando intentó pararse, se lo llevó por delante el Transcaribe”, relata Olga Magallanes, mamá de John.
John Javier logró escaparte de su verdugo, pero no de la muerte que lo acorraló desde el instante en que ‘el Soldadito’ le sacó un machete.
Los Jiménez están convencidos de que John estaría vivo de no haber sido perseguido por ‘el Soldadito’ en la noche del lunes.
“Como la gente empezó a señalarlo, los policías arrestaron a ‘el Soldadito’ y se lo llevaron a la Estación de Policía, pero después lo soltaron. Alguien llegó y pidió que lo dejaran libre”, aseguró la familia del fallecido.
Pese a que las autoridades encargadas del caso indicaron que el hecho obedeció a un accidente de doble impacto, los dolientes quieren justicia.