Andrés Negrete Mendoza trabajaba en una universidad y estaba desaparecido desde el pasado lunes 13 de enero.
La búsqueda de Andrés Felipe Negrete Mendoza terminó de manera dolorosa con el hallazgo de su cuerpo sin vida en avanzado estado de descomposición.
El descubrimiento ocurrió en la mañana del miércoles 15 de enero, alrededor de las 7:30 a.m., cuando pescadores encontraron un cuerpo flotando en el río Sinú, cerca de la estación de Policía Norte en Montería, Córdoba.
Tras recibir la notificación, la Policía Metropolitana confirmó que se trataba de Andrés Felipe Negrete Mendoza, quien había sido reportado como desaparecido dos días antes.
Según reportes de la prensa local, Andrés Felipe era hijo de los pastores Luis Negrete y Cándida Mendoza, reconocidos miembros de la Asociación Internacional de Evangelismo y Comunión (AIEC).
Además, trabajaba en la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad de Córdoba. Su cuerpo habría sido identificado por sus familiares gracias a un tatuaje en uno de sus brazos.
Se reportó que el joven había desaparecido el lunes 13 de enero tras ser víctima de un robo en el que le habrían administrado escopolamina. Aunque ese mismo día fue encontrado desorientado y trasladado a una clínica, escapó corriendo del centro médico poco después y desde entonces no se tenía información sobre su paradero.