Con maquinaria amarilla esperan recuperar la comunicación entre los corregimientos.
La temporada de lluvias que recién inicia en el Magdalena, ha generado temor en los habitantes de varios municipios del departamento, los cuales, cada que inicia el invierno se ven afectados por la creciente de los ríos y deslizamientos de tierra.
Caso puntual, fue el desbordamiento del Río Sevilla, el cual ocasionó daños en varios corregimientos de la Zona Bananera y dejó como principales afectados dos fincas del sector.
Asimismo, las fuertes precipitaciones registradas hacia la Sierra Nevada de Santa Marta, generaron emergencias en las comunidades de Palmor, San Pedro y otras veredas aledañas, donde se registraron varios deslizamientos que dejaron incomunicadas a las poblaciones.
Por lo anterior, la Gobernación del Magdalena, en cabeza de las secretarías de Interior, Infraestructura y la Oficina de Gestión de Riesgo Departamental, con el objetivo de atender a los damnificados.
El gobernador Carlos Caicedo, dispuso todo el banco de maquinaria amarilla con el que cuenta la administración, para despejar los derrumbes que obstaculizan las vías terciarias y ocasionan caos en los territorios.
Los adultos mayores, niños, mujeres en estado de embarazo y personas en condición de discapacidad, serán atendidos de manera prioritaria por profesionales una vez logren el ingreso al pueblo.
Finalmente, el llamado de los organismos de socorro es a que las comunidades se mantengan alertas en esta época de lluvias y logren salvaguardar sus vidas en caso de una emergencia.