En una edición especial, la tradicional gaseosa “Colombiana” cambió de nombre como una muestra de solidaridad con los migrantes venezolanos presentes en el país.
En la etiqueta del refresco, aunque su diseño parecer ser el mismo, se puede leer “Países hermanos”, como una manera simbólica de apoyar a los vecinos llegados a nuestro país.
“A nosotros se nos conoce por nuestra calidez humana y por la manera de tratar al extranjero y los venezolanos no son la exepción”, dijo Mauricio Pinto, director de la unidad de negocios de gaseosas Postobón.
La idea surgió luego de enterarse que en Tunja, Boyacá, hay una familia que presta ayuda humanitaria a quienes transitan por allí de paso.
En dicha vivienda los caminantes y venezolanos que van de paso, cuentan con un lugar de descanso y donde les ofrecen de comer y beber a los exhaustos venezolanos.
Tras enterarse de dicha iniciativa, los directivos de la marca decidieron proveer de refrescos el lugar de paso para calmar la sed de los caminantes.
“Queremos que cada venezolano que pase por allí sea recibido con nuestras botellas”, dijo el directivo.
La etiqueta contiene un mensaje que palabras más, palabras menos dice que antes de ser ciudadanos de un lugar somos personas; si esta botella llega a sus manos compártala con un hermano venezolano.