El confeso asesino contó que se iba a suicidar luego de cometer el crimen.
En diálogo con un medio de comunicación local, el joven Mario Bastidas, confeso feminicida de Yaya Gómez, entregó más detalles de lo ocurrido el pasado lunes 8 de enero, día en que decidió arrebatarle la vida a su expareja sentimental asfixiándola.
El señalado, que se encuentra en las instalaciones de la Fiscalía General de la Nación por voluntad, aseguró que no le interesa la condena que recibirá por el crimen cometido, ni el futuro que se le avecina en materia de judicialización.
“Lo único que puedo hacer es pedir disculpas, porque no puedo retroceder el tiempo (…) quiero excusarme ante mi familia, los seres queridos de Juliana, amigos y personas que nos conocieron”, manifestó Bastidas.
Asimismo, el joven que confesó el asesinato, contó que luego de la ‘tragedia’ pensó en suicidarse para evitar la captura. “Yo no me iba a entregar, pero pensé que mi mamá y hermano me preferirían tener preso y no muerto. Por eso me fui a Minca y llamé a la Policía”.
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Por otro lado, en cuanto a su relación con la víctima, indicó que actualmente sostenían una relación comercial, debido a que ambos se dedicaban a crear contenido para adultos; detalles que también brindó a las autoridades.
“Nos veíamos clandestinamente porque su familia no quería que estuviéramos juntos. Ella, empezó a ponerle sentimiento a los encuentros que teníamos, por lo que decidí alejarme (…) el día que ocurrió la tragedia fue por una discusión que tuvimos por nuestra relación”, dijo Mario Bastidas.
Finalmente, es preciso mencionar que, durante la mañana de este miércoles, un juez de la República definirá si el confeso feminicida cumplirá su condena en un centro carcelario o en su lugar de domicilio.