Estos hombres se están formando como motoristas costaneros.
El grupo de expescadores del Parque Tayrona, que hoy presta servicios ecoturísticos en Bahía Gayraca y Bahía Concha continúa educándose para cambiar sus vidas y sus historias a través de un trabajo amigable con esta reserva natural.
Lo anterior, con el objetivo de implementar acciones para la consolidación de las alternativas productivas sostenibles que contribuyan a la disminución de presiones por pesca y al fortalecimiento del ecoturismo como estrategia de conservación del parque.
Estos hombres, desempolvaron los cuadernos, dejaron la indumentaria de pesca y acudieron juiciosos a recibir las orientaciones para certificarse como motorista costanero y/o patrón de yate, para poder prestar sus servicios de transporte marino bajo la normatividad, cumpliendo los estándares de calidad y la protección del medio marino.
El escenario para el desarrollo de las jornadas académicas es la Fundación para la Educación Marítima, Portuaria y de Pesca –Fundamar-, liderada por el capitán Carlos Anzola, que a través de su equipo humano comparte sus experiencias, conocimientos y saberes como marino, adquiridas durante muchos años de navegación y de formación a la ‘Gente de Mar’.
Los expescadores hoy se apropian de la normatividad marítima, las técnicas para el manejo de las embarcaciones, las maniobras en altamar, los sistemas tecnológicos, los modelos de la Organización Marítima Internacional (OMI) para la supervivencia, navegación, seguridad, rescate, liderazgo, trabajo en equipo, protección al personal, atención de emergencias, respeto al medio marino, entre otros.
Cleimar Cayón, presidente de Asoger Gayraca, destaca los beneficios del curso, que le permitirá adquirir la licencia y poder transportar a los visitantes de la Bahía de Gayraca, bajo la norma ambiental y los estándares de la Dimar.
“En el tema informal no teníamos conocimientos, sino experiencias porque desarrollábamos la labor de manera empírica. Hoy con estas enseñanzas sabemos sobre seguridad, bioseguridad, impacto ambiental, presentación personal, recibimiento a los visitantes, protección a la fauna y flora, cuidado del área protegida”, señaló Cleimar.
Finalmente, desde la Dimar se adelantan las gestiones para la obtención de las licencias de las lanchas y los permisos de sus organizaciones en busca de garantizar la formalización de sus emprendimientos de negocios y la seguridad de los pasajeros.