La reunión tuvo lugar en el despacho del señor Ministro en Bogotá, hasta donde se trasladaron la Gerente de la Essmar y su equipo asesor; mientras que el alcalde (e), Andrés Rugeles, y el viceministro de Agua, Jose Luis Acero, participaron a través de videoconferencia.
El jefe de la cartera de vivienda ratificó el compromiso del Gobierno Nacional en el acompañamiento y la asistencia técnica permanente para que la capital del Magdalena supere la problemática que ha padecido históricamente por la falta de agua. La reunión de seguimiento analizó tres temas: el avance del plan de emergencia y contingencia, las soluciones de corto y mediano plazo y las estrategias de largo plazo. La jornada de trabajo dejó las siguientes conclusiones:
-El plan de emergencia y contingencia avanza de forma satisfactoria y ha demostrado una contundente coordinación interinstitucional, toda vez que, en trabajo conjunto con la alcaldía de Santa Marta, la empresa de servicios públicos, la Ungrd y la Cruz Roja se ha llevado agua diariamente a 21 mil familias en 186 barrios de la ciudad. La operación se adelanta con 60 carrotanques, 21 de los cuales están trabajando 24 horas los siete días de la semana.
Estas acciones son complementadas por la Policía Metropolitana, que en operativos recientes ha logrado desmantelar 40 puntos de conexión fraudulenta a las redes. En la misma línea de control inmediato, la Alcaldía implementó el sistema de pico y placa para lavaderos de carros y expidió un decreto para prohibir el uso recreativo de las fuentes hídricas de la zona.
-En cuanto a las soluciones de corto y mediano plazo, las autoridades trabajan en cinco obras que permitirán reducir el déficit de agua hasta en un 50% en periodos de sequía y mejorar el sistema de distribución de agua durante todo el año. De estas obras, se priorizaron dos para darles mayor celeridad:
La primera será la optimización de la Planta de Tratamiento de Agua Potable de El Roble, que hoy tiene la capacidad de tratar 350 litros por segundo y que, después de las obras, tratará 450 litros por segundo. En segundo lugar, está la construcción de la Planta de Tratamiento de Agua Potable de El Curval Fase I, que tendrá capacidad de 400 litros por segundo e incluye la conducción a Mamatoco.
Con el objetivo de apoyar a la Essmar en la estructuración de estos proyectos, para que puedan ser presentados en el menor tiempo posible ante la ventanilla única del Ministerio de Vivienda, se pactó la realización de una reunión semanal de acompañamiento técnico y otra quincenal para revisar los avances de los compromisos.
Así mismo, el Viceministerio de Agua acordó disponer de un equipo que se trasladará a Santa Marta para dar asistencia permanente. De manera paralela, se realizará un piloto de sectorización y optimización de redes para solventar el grave problema de pérdidas de agua en la ciudad, que actualmente supera el 70%.
-Con respecto a las acciones a largo plazo y, en conjunto con el Departamento Nacional de Planeación, se avanza en la actualización de la Alianza Público Privada (APP) para adoptar la solución definitiva. El objetivo del Gobierno Nacional con este proceso es que el proyecto responda a tres aspectos fundamentales:
- Viabilidad financiera: la solución debe responder a la situación fiscal del país.
- Impacto regional: que garantice eficiencia y mayor transparencia en la prestación de los servicios, optimizando recursos.
- Sostenibilidad ambiental: la solución debe incluir inversiones en la conservación y cuidado de las cuencas.
En este proceso se evaluarán y determinarán las fuentes hídricas de abastecimiento más adecuadas, así como las fuentes de financiación viables que contemplen los aspectos técnicos y legales.
Cabe aclarar que los responsables de garantizar la prestación eficiente de los servicios públicos son los municipios, no obstante, el Gobierno Nacional reitera que llevar agua a la capital del Magdalena es una de las prioridades del presidente Iván Duque y, por ende, la Nación movilizará todos los equipos técnicos necesarios, acompañando y apoyando el proceso para lograr consensos y que finalmente se determine y ejecute la mejor solución para el Magdalena.
