A las 9:00 de la mañana de este lunes se tiene previsto que Pablo Catatumbo cumpla la cita con la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), luego de que fue llamado para rendir su versión voluntaria sobre el caso 001 más conocido como ‘Retención ilegal de personas por parte de las Farc-EP.
De acuerdo con la magistrada de la Sala de Reconocimiento y Revisión de la JEP, Julieta Lemaitre, Pablo Catatumbo hace parte de los 31 comparecientes que deben rendir su testimonio ante dicho proceso que no es otro que entregar información sobre los secuestros perpetrados en el marco del conflicto armado.
Según Lemaitre, si bien se habla de versiones voluntarias, “la comparecencia es obligatoria en la versión individual, mientras que la información que revelará es voluntaria”.
Para la JEP esta declaración tiene como propósito el acopio de información para contribuir a la búsqueda de la verdad. En ese sentido, la Sala de Reconocimiento, a través del auto 02 de 2019, estableció que estas versiones tendrán dos dimensiones: la individual y la colectiva.
En la dimensión individual la Sala requiere “la verdad plena de cada compareciente sobre su participación directa o no, en la planeación y ejecución de los hechos y conductas relatados en los informes del caso 001”.
En la dimensión colectiva, explicó que los comparecientes deben aportar verdad plena sobre los hechos y conductas del caso, pero no como individuos sino como grupo al margen de la ley. “La versión voluntaria, en su dimensión colectiva, debe relatar de manera exhaustiva y detallada los hechos, conductas y las circunstancias de su comisión”, señaló.
Para la JEP, este relato debe ser suficiente para establecer responsabilidades, siempre y cuando se tengan elementos para ello, respecto de los hechos descritos en los informes recibidos por la Sala de Reconocimiento.
Catatumbo no es el primero de los excombatientes de las FARC que se presentan ante dicha Jurisdicción, el pasado jueves lo hizo Rodrigo Londoño más conocido como ‘Timochenko’. La diligencia del exmiembro del grupo guerrillero se llevó a cabo de manera reservada y contó con la presencia de los magistrados de sala y un delegado de la Procuraduría.