El valor inicial de cada chaleco era de $1.160.493, pero tras la denuncia y revisión del contrato, se ajustó a $130.000, representando una reducción del 89%.
La Empresa de Servicios Públicos de Santa Marta (Essmar) logró una reducción significativa en el costo de los chalecos adquiridos para sus trabajadores, luego de que se hiciera pública una denuncia sobre presuntos sobrecostos en la compra de estos implementos.
Inicialmente, el valor unitario de cada chaleco había sido fijado en $1.160.493 (IVA incluido), pero tras la revisión del contrato, el precio se ajustó a $130.000 por unidad, logrando una disminución del 89%.
La indumentaria fue suministrada por la empresa contratista Reproquic S.A., que, en respuesta a la denuncia, emitió una nota crédito reflejando la reducción de costos.
Isis Navarro, quien asumió como interventora de Essmar el 30 de agosto, explicó que cuando llegó al cargo, el proceso contractual ya estaba en marcha con tres oferentes participando.
Sin embargo, tras cuestionar el alto valor asignado a cada chaleco, se evidenció que el costo real debía estar entre $300.000 y $400.000, lo que generó una polémica sobre un posible sobrecosto de más de $20 millones.
La situación se tornó aún más delicada en septiembre, cuando el Ministerio de Trabajo realizó una inspección tras recibir una queja sindical que denunciaba la falta de entrega de la dotación.
Como resultado, la entidad emitió un acta en la que advertía que Essmar debía entregar los uniformes antes del 10 de octubre, o enfrentaría una sanción de hasta $5.000 millones.
Ante esta situación, la administración de Essmar se vio obligada a agilizar la entrega de los chalecos para evitar la millonaria multa. Navarro aseguró que, aunque no tuvo responsabilidad en la licitación inicial, su equipo trabajó en la optimización del proceso y en la reducción de costos.
“La empresa atraviesa una crisis financiera grave y no podía asumir una sanción de esa magnitud. Durante mi gestión, no desembolsé ni un solo peso por ese contrato”, explicó Navarro, quien además resaltó que el comité evaluador del contrato estaba conformado por miembros de Fuerza Ciudadana, Recursos Humanos y del área jurídica de Essmar.
Con esta reducción de costos, Essmar logró mitigar el impacto financiero y garantizar la entrega de los implementos a sus trabajadores, evitando así problemas legales y económicos para la empresa.
