En Barranquilla sería bien conocida la presunta relación de la excongresista con el empresario Julio Gerlein, hermano del poderoso político Roberto Gerlein.
Aída Merlano buscó convertirse en la heredera política de la familia Gerlein, de gran influencia y poder en la costa Caribe colombiana, pero en su ambición solo la apoyó el empresario, recordó Séptimo Día en su emisión de este domingo.
El especial mencionó que justo a finales del año 2017, por problemas de salud que venían afectando al entonces senador Roberto Gerlein, la familia decidió buscar a quien mantendría su representación en el Congreso de la República.
“Merlano llegó a los exclusivos círculos barranquilleros al mezclar el poder y el sexo”.
“Estos grupos políticos tradicionales consideran que las curules en el Congreso son un patrimonio personal privado de ellos y creen que las pueden heredar de generación en generación”, explicó la periodista Laura Ardila a ese programa.
La comunicadora afirmó que, bajo esa preocupación, la familia se fijó en un yerno y luego en un cuñado de Roberto, a quienes finalmente no apoyaron pues a estos les faltaba “peso electoral y en su imagen”.
Según Ardila, fue allí cuando Merlano Rebolledo se postuló para “tomar las banderas de Roberto Gerlein”, su padrino político y junto a quien construyó su carrera. Pero tanto él como esa “ala de la familia” no la aprobaron, por lo cual alguien “igual de poderoso” decidió respaldarla: el empresario Julio Gerlein.
“Aída Merlano tenía una relación personal afectiva con Julio Gerlein, públicamente conocida en Barranquilla”, aseveró la periodista, quien añadió que ese vínculo “quebró la casa política”.
Ese “supuesto romance”, como lo calificó el periodista Manuel Teodoro, habría tenido serias implicaciones al interior del clan, pues Julio además era el “financiador de las campañas de su hermano Roberto”.
Wendy Herrera, aspirante al Concejo de Cartagena indicó a Séptimo Día que esta situación causó “una rivalidad” entre los hermanos Gerlein y que cuando Julio decidió apoyar a Merlano “ella ya no necesitaba de Roberto”.
A Aída Merlano “la hicieron moza, amante, líder política, representante y senadora”.
Manuel Teodoro indicó además que “para fortalecerse, Julio y Aída hacen un pacto con la poderosa casa Char [de la familia del actual alcalde de Barranquilla, Álex Char], una alianza estratégica, algo así como un ‘tú me consigues votos y yo te consigo votos’”.
Esto terminó, resaltó Teodoro, no solo dándole su curul al Senado a la hoy mujer prófuga de la justicia, sino además “dividiendo la poderosa y tradicional casa política Gerlein”.
Mire aquí el informe de Séptimo Día sobre el “supuesto romance” que habría dividido a los Gerlein (Minuto 20:37):
Tomado de Pulzo
