El joven de 30 años, padre y trabajador, debutaba con su propia empresa de domicilios cuando fue asesinado en Timayui. Sus últimas horas quedaron registradas en redes sociales.
El lunes amaneció con ilusión para Andrés Campo. Después de años de esfuerzo como mototaxista, por fin veía despegar su propio emprendimiento de domicilios.
Desde temprano, compartió en sus redes el inicio de su jornada, mostrando con orgullo los primeros pedidos que transportaría.
Como siempre, su día estuvo lleno de diligencias, trabajo y amor por su familia. Se tomó el tiempo para llevar a su hijo a cortarse el cabello y siguió con sus entregas, sin imaginar que esa sería su última publicación.
Horas después, Andrés fue víctima de un ataque sicarial en el barrio Timayui. Según versiones preliminares, recibió una llamada que, posiblemente, era un pedido de servicio.
Sin sospechar el peligro, se dirigió al punto de encuentro, donde un hombre en moto lo interceptó y le disparó en varias ocasiones. Gravemente herido, fue trasladado de inmediato a un centro médico, pero no logró sobrevivir.
Amigos y familiares aún no pueden asimilar la noticia. Lo describen como un joven trabajador, buen amigo y jefe, siempre comprometido con su hijo y seres queridos.
Su teléfono celular fue encontrado en la escena del crimen, y las autoridades ahora rastrean la llamada que lo llevó a la trampa mortal. Se espera que esta pista ayude a esclarecer el crimen y dar con los responsables de arrebatarle la vida a un hombre que solo buscaba construir un mejor futuro.
