En el encuentro, que duró 28 minutos, hablaron sobre la implementación del acuerdo de paz y la crisis en Venezuela, entre otros temas.
El presidente Duque aseguró que el pontífice lo animó a trabajar por la unidad de su país y a ser “las manos” que solucionen “la veta tan dura” que dejó el conflicto.
El pontífice, hizo esta recomendación durante el tradicional intercambio de regalos, cuando entregó a Duque un medallón que representa un árbol de olivo “con dos ramas que van uniendo lo que está separado”, según explicó.
“Deseo que sus dos manos sean como estas dos ramas, que unan Colombia y solucionen esta veta tan dura que fueron los cincuenta años”, indicó Francisco, en referencia al conflicto armado.
El papa se puso unas gafas para leer la inscripción del medallón y reiteró: “Buscar lo que une y superar lo que divide”, a lo que Duque respondió: “Este es el mensaje que siempre he tratado de transmitir, concretamente que se busque lo que une y no lo que nos divide, significa mucho para mí”, afirmó.