El hacinamiento en las cárceles del país continúa. Esa fue la deducción de la Contraloría General de la República, luego de que adelantara visitas a las cárceles de Pasto e Ipiales (Nariño), durante tres días.
Según el informe del ente de control, la situación de hacinamiento y salubridad conllevaron a que el Defensor regional instaurara acciones judiciales.
En la visita a la cárcel de varones de Pasto, la Contraloría evidenció que, “los internos no cuentan con áreas de comedor para consumir alimentos, como sucede en el Patio 4 del establecimiento carcelario, ni con áreas para distribución de alimentos, lo que hace que las condiciones de higiene y presentación de los alimentos, vulneren parámetros mínimos de dignidad humana”.
En razón a la sobrepoblación carcelaria se evidenció que hay personas en los pasillos, es decir, los internos no cuentan con celda asignada, deben dejar sus pertenencias en las vías de circulación, donde pernoctan en las horas de la noche.
El ente de control también señaló que a pesar de que existe la infraestructura hidráulica para que funcionen los baños al interior de las celdas del patio 6, no es posible implementarlos por los recurrentes actos de vandalismo por parte de los internos que destruyen el equipamiento.
“Tal circunstancia lleva a que las heces fecales y orina que producen los internos de esa área durante las horas de encierro, sean expulsadas al exterior del edificio, con las consecuencias de salubridad que esta circunstancia ocasiona”, dice el informe de la Contraloría.
Además de esto, también se percataron que, en la reclusión de mujeres, que funciona como patio separado al interior del penal, cinco personas comparten una celda, entendiéndose que tan solo deben pernotar dos mujeres.
En razón a la última observación de este centro penitenciario, la Contraloría dijo que, “los internos que cuentan con celda asignada, llevan a cabo su visita conyugal en tales espacios. Por su parte, los internos que no cuentan con ella, deben atenderla en un espacio a todas luces inadecuado (colectivo), que no está diseñado para tal fin”.
Frente a la visita hecha a la cárcel hombres de Ipiales, la Contraloría encontró que el inicio de las obras de intervención de la infraestructura hidráulica, agravó el hacinamiento ya existente en dicho penal, ya que es necesario mantener libre el área donde se realizarán los trabajos, y los internos deben ser redistribuidos en los restantes patios, lo que lleva a que muchos de ellos que duerman en los baños.
“Como resultado de la visita se encontró que el primer patio que fue desocupado para intervenir, lleva dos meses en trabajos, tiempo excesivo que agrava el hacinamiento en los demás patios. La demora se debe a suministro de material por parte del consorcio constructor”, dice el informe.
Este no es el único reparo, en la visita la Contraloría también dejó en evidencia que el área de sanidad no cuenta con ‘cielo raso’ o techo, lo que lleva a que las instalaciones se inunden cada vez que llueve.
En cuanto a la alimentación alertaron que, la preparación de la misma se realiza en un espacio provisional en razón a las actuales obras. “No obstante, tales instalaciones no garantizan el cumplimiento de los requisitos exigidos por las autoridades sanitarias”.
SE MANTIENE EL ESTADO DE COSAS INCONSTITUCIONAL
Esta es la primera, de una serie de visitas que realizará la Contraloría a las cárceles ubicadas en varios departamentos del país.
“La situación detectada en los Establecimientos Carcelarios visitados en Nariño confirma una vez más que, se mantiene el Estado de Cosas Inconstitucional declarado por la Corte en materia penitenciaria y carcelaria”, dijeron.
En su más reciente informe de seguimiento a las sentencias de la Corte Constitucional, de julio de 2018, y como producto de la visita a 22 establecimientos carcelarios, la Contraloría concluyó que persisten varias de las situaciones por las que el alto tribunal efectuó la declaratoria, y que mientras subsistan, continuarán justificando el estado excepcional en que se encuentra el sistema.
EL HACINAMIENTO EN CÚCUTA, HABLA MINJUSTICIA
Este sábado, la Ministra de Justicia, Gloria María Borrero, expresó que habrá atención a las cárceles y se optimizará el sistema de justicia local en Cúcuta. Esto luego de que evidenciara desde su ministerio que en dicha ciudad existe un hacinamiento de hasta el 60%, mientras que en el municipio de Ocaña, hasta en un 220%.
En razón al sistema carcelario en esa zona del país, la Ministra dijo que en 2019 se llevarán a cabo soluciones móviles que amplíen los cupos, esto como parte de la estrategia a corto plazo, mientras se construye una nueva infraestructura. Además de ello, destacó las obras de mejora que se adelantan actualmente para el progreso de las condiciones de vida de los reclusos.
En medio de la visita que realizó un recorrido por el Complejo Penitenciario y Carcelario de la ciudad de Cúcuta, esto con el fin de conocer de primera mano la situación del penal.
En el recorrido la ministra encontró que existen talleres de maquila y confección, donde se producen más de 3.600 uniformes para los diferentes establecimientos del país.
“Pese a la situación de hacinamiento, en Cúcuta los internos trabajan de manera efectiva por su resocialización. Además del trabajo en los talleres de maquila, más de 2.900 privados de la libertad realizan actividades de bisutería, carpintería, agricultura y telares” destacó Borrero.