Dumek Turbay trata de ascender al equipo de la ciudad de donde es alcalde a punta de escándalos.
Antes que se conocieran los resultados de las elecciones a la Alcaldía de Cartagena ya era soñado el nombre de Dumek Turbay, apellido político de tradición pero con investigaciones a nombre propio por ser presuntamente un corrupto.
El que llamó cobarde a la directiva del Unión Magdalena, que dirige el PSG de la B en Colombia con Teo, y un montón de veteranos costosos y jugadores de la primera A, que no pudieron llegar a ninguna de las dos finales de la B; le adelantan varias investigaciones por presunta corrupción.
La Corte Suprema de Justicia le adelanta 14 procesos: 11 por los delitos de peculado por apropiación y 3 por celebración indebida de contratos, contratar sin el lleno de requisitos legales, prevaricato por omisión y enriquecimiento ilícito. y otros y 16 más la fiscalía de Bolívar. Y aparece en el registro del sistema penal con 17 noticias criminales inactivas y 16 más en la Fiscalía regional Bolívar, 8 procesos en acción.
Uno de los procesos más sonados y que aún sigue activo, es el que se le adelanta por presunta corrupción en la empresa de servicios públicos “Aguas de Bolívar”, cuando era gobernador. Audios revelados por medios de comunicación dan cuenta, de que el gerente de Aguas de Bolívar Miguel Torres Scaff (sobrino de Vicente Blel Saad y primo de Vicente Blel) afirmaba que en Cartagena el negocio político se movía alrededor del pago de comisiones de aproximadamente el 15% para la adjudicación de contratos”.
Dumek, el valiente hace parte de las casas políticas tradicionales y cuestionadas de Bolívar: la de su primo y senador liberal Lidio García, investigado por la Corte Suprema por supuesta corrupción en la elección de la contralora distrital en 2016. Y la del clan Montes, liderado por el parapolítico William Montes, que maneja una de las alas más importantes del partido Conservador en Bolívar.