Este mamífero habita en 23 Parques Nacionales naturales de Colombia y su existencia es clave para el bienestar de los ecosistemas del país.
Este domingo 21 de febrero se conmemora la existencia del oso anteojo o también conocido como oso andino, una especie que habita en 23 Parques Nacionales de Colombia y es considerado de gran importancia ecosistémica para el país.
Esta especie está presente en los bosques y páramos de las tres cordilleras del país, motivo por lo que es denominado guardián de los páramos y jardinero del bosque.
Es llamado así también porque es un gran dispersor de semillas que ayuda a la renovación de los bosques y páramos y por ser un excelente trepador de árboles, que al construir sus camas con las ramas ayuda a que la luz ingrese contribuyendo a la germinación de semillas.
Aunque no se tienen datos del número de individuos en Colombia se ha reportado su existencia en los Parques Nacionales como: PNN Paramillo, Chingaza, Tatamá, Sumapaz y Farallones de Cali.
En la actualidad, el oso anteojos es catalogado como vulnerable a la extinción, su principal amenaza es la fragmentación y pérdida de su hábitat natural generada por la implementación de actividades productivas.
Entre ellas se encuentra la tala de los bosques, por la cacería como práctica de exhibición para usos tradicionales o medicinales o como respuesta al eventual consumo de ganado o de cultivos de las comunidades aledañas a su hábitat.