Esta semana finalmente ocurrió lo que muchos cartageneros esperaban desde hace tiempo: la salida de Electricaribe como operador del servicio de energía en la Costa. Desde el 1 de octubre, es la empresa Afinia, filial del grupo EPM, la encargada de suministrar el servicio a los cartageneros, al resto de municipios de Bolívar y también a los departamentos de Sucre, Córdoba y Cesar.
Ángela Patricia Rojas, agente interventora de Electricaribe, le dijo al diario cartagenero El Universal, donde se refirió a su paso por este cargo y a los esfuerzos financieros realizados para evitar que la compañía colapsara y provocara un racionamiento de energía en la región Caribe.
“Al momento de asumir como agente interventora, la meta era seguir mejorando la prestación del servicio por parte de la compañía que tenía varios años que no hacía inversiones, además de mejorar su situación financiera”, dijo Rojas, quien asumió el cargo de agente interventora el 16 de noviembre de 2018, dos años después de que la empresa Electricaribe fuera intervenida por la Superintendencia de Servicios Domiciliarios en noviembre de 2016 y luego de que se ordenara su liquidación el 14 de marzo de 2017.
Esto por la mala calidad del servicio traducida en la cantidad de horas que tenían que pasar los ciudadanos sin luz ante cortes imprevistos, que para ese entonces llegaba incluso hasta a 96 horas al mes, cuando el promedio nacional era de 38 horas.
Al momento de la intervención, Electricaribe contaba con un pasivo externo por alrededor de $2,4 billones y también con un pasivo pensional de $1,2 billones, hecho que evitó que se realizaran las inversiones mínimas para el mantenimiento de las diferentes subestaciones, circuitos y equipos, que eventualmente se fueron deteriorando perjudicando así a la red eléctrica de la ciudad y a la región entera, que padecía por el pésimo servicio.
A pesar de ello, Rojas destacó el trabajo que se ha venido haciendo dentro de la empresa, ya que este ha permitido dejar inversiones para lo que resta el año y también para el próximo, de manera que los nuevos operadores, Afinia y Aire (en la zona de Atlántico, Magdalena y La Guajira), puedan trabajar sobre ellas.
“Creo que la gestión que se ha realizado se ha hecho de una forma transparente y ambientada a brindar mejoras. Dejamos inversiones por $1.1 billones durante un año”, explicó.
De igual manera añadió que otro aspecto positivo fue la elaboración de inventarios, insumo vital para los nuevos operadores de energía.
“Cuando llegamos al cargo esta compañía no tenía nada, ahora estos nuevos documentos se les pasarán a las nuevas empresas para que puedan tener inventarios aproximadamente por seis meses, que les permita hacer todo lo que tiene que ver con mantenimiento o reparación de daños”, precisó.
Según Rojas, todos estos elementos aportan de manera positiva al proceso de empalme que se ha venido llevando a cabo con ambas empresas y que comenzó luego de que ganaran la subasta del pasado 20 de marzo.
“Este ha sido un proceso de interacción continua, se hicieron unas mesas de trabajo, se entregaron procesos, procedimientos y para ello es importante recibir la compañía bien y comenzar una gestión en pro de mejorar la calidad del servicio”, puntualizó Rojas.
La funcionaria celebró la llegada de los nuevos operadores el pasado 29 de septiembre durante la entrega de llaves y destacó todo el trabajo realizado durante estos últimos dos años en la búsqueda de una solución integral al problema de Electricaribe, cuya era finalmente terminó.