La decisión se tomó en vista del incremento de precipitaciones pronosticado por el IDEAM, que advierte un aumento del 20% en los niveles de lluvia hasta junio, lo que podría intensificar el riesgo de deslizamientos, inundaciones y otras amenazas naturales.
El Consejo Distrital de Gestión del Riesgo de Desastres declaró de manera unánime el estado de calamidad pública como medida preventiva frente a la variabilidad climática y con el fin de fortalecer la capacidad de respuesta ante posibles emergencias.
La declaratoria permitirá adelantar acciones urgentes en materia de prevención, mitigación y atención de emergencias. Entre estas se contemplan labores de estabilización de taludes, intervención en cerros, y mejoras en la capacidad hidráulica de ríos y quebradas mediante el uso del Banco de Maquinaria Amarilla. Además, se desarrollarán estrategias de comunicación para la sensibilización ciudadana y se intervendrán manual y técnicamente diversas cuencas hídricas con el fin de reducir el impacto de las lluvias intensas.
Durante la sesión, liderada por Álex Velásquez, director de la OGRICC, y con la participación del IDEAM, organismos de socorro y ESSMAR, se expuso también la crítica situación de desabastecimiento de agua en varias zonas del Distrito. Según reportes, el problema se ha visto agravado por conexiones ilegales y bajos niveles de almacenamiento. Ante esto, la Alcaldía anunció que adelanta gestiones con entidades públicas y privadas para garantizar el suministro del recurso hídrico mediante medios alternativos y la instalación de tanques de almacenamiento en los sectores más vulnerables.
