Santa Marta es la primera ciudad del Caribe que -como Distrito especial- adopta una política pública de Educación Ambiental.
El Departamento Administrativo Distrital de Sostenibilidad Ambiental -Dadsa- será el encargado de brindar las asesorías técnicas y los lineamientos sobre las acciones que deberán tener las empresas y los samarios, en el marco de la primera Política Pública Distrital de Educación Ambiental de la región Caribe, la cual fue aprobada por el Concejo de la ciudad y recientemente sancionada por la Alcaldesa Virna Johnson.
Se trata de una iniciativa con la que se brindarán herramientas técnicas, académicas y conceptuales, a los ciudadanos para que puedan afrontar con conocimientos las diferentes problemáticas ambientales.
La autoridad ambiental del Distrito actuará como parte del Comité Intersectorial Distrital de Educación Ambiental -Cidea-, el cual será concertado por 43 miembros, entre esos: gremios económicos y sectores sociales que, junto al Dadsa, deberán presentar una propuesta para coadyuvar a la superación de las problemáticas ambientales de la capital del Magdalena, como parte del Plan de Desarrollo Distrital, siendo esa la principal apuesta de esta política pública.
“Nos llena de orgullo ser la primera ciudad del Caribe en tener esta política pública, aprobada mediante el acuerdo 001 del 24 de febrero de 2021. Esta fue construida con diversos miembros de la academia, la comunidad y sectores ambientales, será fundamental para articular actores y recursos. Invitamos a los samarios a que, desde los colegios, los barrios y sus trabajos promovamos la sostenibilidad”, manifestó la alcaldesa.
Mientras que el Dadsa -como máxima autoridad ambiental del Distrito y parte de la Secretaría Técnica del Cidea, junto a la Secretaría de Educación-, prestará asesoría técnica y trazará los enfoques que deberán asumir los sectores para la superación de las problemáticas identificadas, con miras a lograr una Santa Marta más sostenible de cara a sus 500 años.
De esta forma, la capital magdalenense logra ser la primera ciudad del Caribe que -como Distrito especial- adopta una política pública de Educación Ambiental.