Según el uniformado, del fuerte impacto que le propinaron, el ojo izquierdo, el cual perdió, le quedó sostenido de un hilo muy diminuto.
En diálogo con la emisora Blu Radio, Walfran Enrique Narváez Pontón, de 27 años, natural de la capital del Magdalena, quien se encuentra recluido en el Hospital Central de la Policía recuperándose de las heridas en su cara y su ojo, contó lo que vivió cuando vándalos lo agredieron.
Luego de recibir un impacto con una piedra en su ojo, el patrullero Narváez relató que vio a los manifestante que estaban infiltrados en la protesta alegrarse como si un equipo de fútbol hubiera metido un gol. Desde hace tres días permanece en el hospital de la Policía, luego de perder su ojo izquierdo en medio de los actos vandálicos.
El afectado también agregó que después de sentir el impacto en su ojo, este le quedó sostenido de un hilo muy diminuto y que por poco se le cae por completo.