Algunas ciudades esperan con ansias el día en que los cruceros vuelvan a encender sus motores y atraviesen los mares del mundo. Hasta ahora no hay una fecha exacta para que eso ocurra; lo que se prevé es que esos viajes serán muy diferentes a los realizados hasta marzo. Si hay algo de lo que se tiene certeza, es que el coronavirus cambió las reglas de esta industria… tal vez para siempre.
En un principio se pensaba que los cruceros estarían paralizados uno o dos meses, pero ahora las grandes compañías han puesto a agosto como el mes del posible reinicio de las operaciones, aunque la palabra final la tienen los gobiernos de cada país.
En el caso de Colombia, por ejemplo, la Presidencia de la República suspendió el tránsito y desembarco de cruceros desde el pasado 12 marzo debido a la presencia del coronavirus, una medida que ha sido plenamente acatada por lo puertos del país, entre ellos el de Santa Marta.
IMPACTO DE LA PARALIZACIÓN DE LA INDUSTRIA DE CRUCEROS
Para Rafael Díaz Balart, coordinador para América Latina de la Asociación Americana de Autoridades Portuarias (AAPA), la paralización de la industria de cruceros ha tenido “un impacto completamente diferente” en las distintas ciudades-puerto.
Mientras en ciudades como Santa Marta el impacto económico por la no llegada de cruceros ha sido moderado, puertos como el de Quintana Roo en México se encuentran “totalmente quebrados” debido a la ausencia de cruceristas.
De acuerdo con estimaciones de la Asociación Internacional de Líneas de Cruceros (CLIA, por sus siglas en inglés), la suspensión de las operaciones de cruceros ha tenido un pronunciado efecto perjudicial en la economía global.
Según datos de la CLIA, la industria de cruceros genera más de 150 mil millones de dólares anuales en actividad económica mundial y respalda más de 1.17 millones de empleos en todo el mundo.
Díaz Balart, por su parte, explica que la industria de cruceros tiene incidencia en casi todos los sectores, desde el transporte y la agricultura, hasta la hotelería, el turismo, la fabricación y más.
Según la CLIA, cuando llegue el momento adecuado para que los cruceros vuelvan a zarpar, la industria será una parte importante de la recuperación económica y social a escala global.
¿ES POSIBLE UNA REACTIVACIÓN?
De acuerdo con Díaz Balart, desde la AAPA se está trabajando para crear consciencia sobre el problema que representa para muchas ciudades la paralización de la industria de cruceros, así como en el apoyo para buscar la forma de reanudar las operaciones de forma responsable y segura.
“El ser humano es inteligente y sabe adaptarse, por esto estoy seguro de que vamos a encontrar los protocolos y la manera adecuada de reanudar la industria de los cruceros. Quizás nada será como antes, quizás ya no podrán abordar seis mil personas un mismo barco, pero estoy seguro de que se hallará la manera de continuar”, afirma.
El representante de la AAPA en América Latina comenta que, por ejemplo, en los países nórdicos existe una pequeña empresa de cruceros que reanudará próximamente sus operaciones con viajes únicamente regionales, para lo cual ha preparado estrictos y sofisticados protocolos de seguridad para evitar el contagio de pasajeros y tripulantes.
“Las empresas están trabajando arduamente para crear las condiciones necesarias para reactivar la industria. Tenemos que mirar esta realidad urgentemente y buscarle soluciones. Estoy seguro de que dentro de la industria de cruceros también vamos a encontrar la nueva normalidad”.
Tomado de noticiaspuertosantamarta.com