La explosión se vivió en la zona urbana de Suárez, Cauca, en un ataque atribuido al Frente Jaime Martínez, disidencia del grupo de Iván Mordisco. El atentado, dirigido contra la Estación de Policía, dejó dos víctimas mortales, cuatro heridos, entre ellos un menor, y graves daños en más de 30 edificaciones. Las autoridades ofrecen una recompensa de hasta 200 millones de pesos por información de los responsables.
Él estallido de un carro bomba sacudió la tranquilidad del municipio de Suárez, Cauca, dejando un saldo de dos personas muertas y varios heridos, entre ellos un niño. El atentado, perpetrado la noche del 3 de noviembre, tenía como objetivo la Estación de Policía, pero el vehículo explotó antes de llegar al punto previsto, causando una devastación que alcanzó viviendas, comercios y un hotel de la zona.
Según informes de las autoridades, el ataque fue ejecutado por el Frente Jaime Martínez, una estructura disidente de las FARC bajo el mando de Iván Mordisco. La detonación fue tan potente que afectó más de 30 inmuebles, derribó fachadas completas y provocó pánico entre los habitantes, quienes huyeron despavoridos ante la intensidad del estruendo.
Autoridades ofrecen recompensa y refuerzan seguridad
El gobernador del Cauca, Octavio Guzmán, condenó enérgicamente el hecho y exigió una respuesta contundente del Estado. “La violencia no puede seguir siendo el lenguaje de quienes buscan poder desde el miedo. Urge una presencia integral del Gobierno”, declaró.
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El Ejército Nacional y la Policía desplegaron un equipo élite de investigación para esclarecer el ataque y capturar a los autores materiales e intelectuales. El comandante de las Fuerzas Militares confirmó que la camioneta utilizada en el atentado fue abandonada a pocos metros de la estación, lo que facilitaría la recolección de pruebas. Se ofreció una recompensa de 200 millones de pesos a quien entregue información sobre los responsables.
Impacto en la comunidad y daños materiales
Uno de los fallecidos se encontraba dentro de un hotel que resultó gravemente afectado por los escombros del vehículo. Otras cuatro personas, incluida una menor, permanecen bajo observación médica en hospitales del departamento. El alcalde de Suárez, César Cerón, lamentó el ataque y aseguró que “es un golpe doloroso para una población que no merece vivir bajo el miedo”.
La onda explosiva causó destrozos en viviendas, ventanales, vehículos y locales comerciales, mientras los cuerpos de socorro trabajaban para evacuar a las familias del sector.


