La mediática estrella del pop lleva 13 años bajo la tutela de su padre por sus problemas de salud mental, el próximo jueves podría quedar libre de su progenitor.
La cantante estadounidense lleva más de una década bajo la tutela de su padre por los problemas desencadenó tras el éxito de la fama.
La icónica chica de los 90 cumplirá los 40 años en este 2021 y solo espera poder ser libre y actuar bajo sus propias decisiones, sin estar sometida al control y vigilancia de su progenitor.
En 2008 un tribunal de California sentenció que la joven de entonces 27 años, quedase bajo la tutela legal de su padre, Jamie Spears, quien desde entonces es dueño y señor de todo el patrimonio financiero de su hija.
El único deseo de Britney en aquel entonces era no tener que estar bajo la tutela de su padre, pero no se le concedió.
“Mi clienta me ha informado que le tiene miedo a su padre”, relató el abogado de la estrella mediática en el juicio. La jueza no quiso eliminar al padre de Britney directamente como jefe de su patrimonio, pero sí nombró a la compañía financiera Bessemer Trust como co-tutora, a Britney le gustaría que fuera un banco quien gestionara sus finanzas.
Así no sea su liberación total, puede recuperar su capacidad para gobernar su vida profesional, económica y, sobre todo, personal.