A través de redes sociales, se denunció que adolescentes serían utilizados para extorsión, sicariato y otros delitos. Habitantes temen represalias y piden intervención urgente de las autoridades.
La denuncia sobre el reclutamiento de menores en los municipios de Soledad y Malambo ha encendido las alarmas en el Atlántico. Publicaciones en redes sociales exponen cómo bandas criminales estarían vinculando a adolescentes e incluso niños en actividades como extorsión, sicariato y otros delitos, aumentando el temor entre las comunidades.
Registros fotográficos divulgados en perfiles de Facebook muestran a menores posando con armas de fuego, presuntamente como parte de un rito de iniciación. Según las publicaciones, estas estructuras utilizan la imagen de un cachorro de león como símbolo de identidad, denominando a los reclutados como “cachorros” de los cabecillas de las organizaciones criminales.
Líderes barriales y habitantes de la zona aseguran que existe temor de denunciar por posibles represalias contra las familias. Temen que otros adolescentes puedan ser atacados o presionados para ingresar a estas estructuras.
“Aquí todos sabemos lo que está pasando, pero nadie se atreve a hablar porque el miedo es más fuerte”, relató un habitante de Malambo bajo reserva de su identidad.
