El encierro, las largas horas en los aparatos electrónicos y otros factores de la pandemia han generado enfermedades mentales en grandes y pequeños.
Los retos estresantes y abrumadores a los que fue sometida la humanidad por cuenta de la pandemia de la Covid-19, causaron efectos enormes de la salud mental de adultos y niños en todo el mundo.
Los testimonios son los mismo, pues las medidas de salud pública como el uso permanente del tapabocas, el distanciamiento social, los protocolos, la nueva forma de estudiar y trabajar, han hecho que las personas se sientan aisladas y les aumente el estrés y la ansiedad.
Un año después de conocerse el primer caso en Santa Marta, este medio de comunicación dialogó con algunas familias samarias para conocer qué efectos psicológicos les ha dejado la llegada del coronavirus encontrando que la depresión y la ansiedad fueron las principales afectaciones.
Las enfermedades mentales se incrementaron no solo por el encierro, también por el temor de contagiarse, así como por el trabajo y el estudio en casa.
Cristina López es una madre de dos niños a quien la pandemia le causó unos altos niveles de estrés, principalmente por el encierro y las extenuantes horas frente a las pantallas, no solo por su trabajo, si no por las clases de su hijo mayor.
“Saber que estás encerrado no porque quieres, sino porque es una obligación automáticamente causa estrés y ansiedad, bueno a mí me pasó. No es fácil cambiar tus rutinas y mantenerte en casa, se sacaron cosas positivas y hubo más tiempo para la familia, pero sin duda alguna hubo esta desestabilización emocional que nos golpeó a todos”, relata.
Esta mujer tiene un hijo de 7 años a quien le tocó dar sus clases desde un computador, “cursaba apenas primero de primaria un año básico, prácticamente me tocó estudiar todo el tiempo con él, el nivel de estrés y tratar de ser el maestro no es nada fácil”, contó.
Pero la titánica jornada académica tenía que ser alternada con cumplimientos laborales y además el cuidado de una niña (su otra hija) de apenas 2 años.
“Mientras el profesor explicaba, yo estaba trabajando desde mi celular, cumpliendo con mis deberes labores. Por otro lado, mi niña pequeña que pensaba que yo estaba en casa de vacaciones quería mi tiempo y sufría estrés porque yo no podía atender y jugar con ella. Era una locura”, detalló.
Cristina, contó que a causa del encierro su pequeña hija sufrió un trastorno psicosocial, pues cuando comenzó la pandemia era una bebé y se mantuvo encerrada por muchos meses lo que hizo que no le costará mucho socializa, lo que le alteraba sus nervios cuando comenzó a tener contacto con otras personas.
Otra historia conocida por SANTA MARTA AL DÍA fue la de Andrea Albear, una madre cabeza de hogar y trabajadora, a quien la pandemia la dejó sin empleo y le tocó devolverse a su tierra natal a casa de sus padres, lo que le causó una depresión.
“Varias empresas sufrieron afectaciones golpeadas y hubo un recorte de persona, yo no lo podía creer y sin más opciones me tocó irme a donde mis padres y comenzar de cero. Yo entré en una depresión, pero bueno me tocaba elevar la cabeza y trabajar en el negocio familiar para seguir adelante”, contó.
Albear dijo que por este cambio su hijo también se afectó, y además que le tocaba estudiar desde el celular porque las clases eran virtuales y todo se le hizo más complejo.
Así como estos dos casos fueron muchos los estragos que causó la pandemia en las familias no solo de Santa Marta, sino a nivel mundial.
Según cifras del Ministerio de Salud en Colombia, las consultas por salud mental ascendieron a más del 30% desde que comenzó el periodo de distanciamiento social, siendo la depresión, la ansiedad, los trastornos afectivos, los trastornos psicosociales y de adaptación los motivos de consulta más frecuentes
Ante ese panorama, la doctora Mónica Alexandra Chacón Montoya, secretaria académica de la Fundación Universitaria de Ciencias de la Salud (FUCS) y psicoterapeuta familiar, brinda algunas sugerencias de vital importancia a la hora de identificar las afectaciones a la salud mental de las personas durante la actual crisis sanitaria.
¿Cuáles son las señales de posibles afectaciones a la salud mental?
La profesional asegura que es importante hablar y promover la cultura de la salud mental frente al entorno pandémico, el cual ha llegado incluso a modificar el estilo de vida de las personas. En ese sentido, la doctora Mónica Chacón expone algunas manifestaciones psicológicas, como lo son:
+Ansiedad frecuente: palpitaciones, sudoración y preocupación
+Pensamientos intrusivos.
+Sensación de miedo o persecución.
+Depresión: llanto frecuente, insomnio y alteraciones en la alimentación (atracones o inapetencia) por más de seis meses.
+Violencia intrafamiliar: aumentan los niveles de estrés por la convivencia permanente.
¿Cómo reaccionar ante esas eventualidades?
La presencia de uno o más de estos síntomas sugiere la necesidad de ayuda profesional. La doctora Chacón hace las siguientes recomendaciones con el objetivo de que el afectado pueda adaptarse y asimilar “la nueva realidad” y mejorar así su calidad de vida y la de su entorno directo:
+Realizar salidas al exterior moderadas.
+Salir preferiblemente acompañado.
+Relajación progresiva.
+Ejercicio de visualización: imaginar espacios abiertos, seguros, controlados.
+Moderar la información que se consume.
+Potencializar las redes de apoyo: estrechar lazos de amistad y relacionamiento con profesionales, familia, amigos y docentes.
La doctora Chacón recalca también la importancia de brindar atención psicológica a las personas que han sobrevivido a la enfermedad del Covid-19, pues han sufrido afectaciones en su salud mental tras haber vivido fuertes experiencias en las UCI.