Además, deberían pagar 39 millones de pesos en sanciones por el delito.
Muchas son las opiniones sobre el asesinato de Julieta, la manatí que fue liberada en las aguas del mar Caribe el pasado 7 de julio.
Unas de las opiniones que está en la controversia es sobre la judicialización de los responsables del crimen ambienta. ¿Existen implicados? ¿Se condenará a alguien? ¿Es un crimen ambienta? ¿Existe una ley que ampare a estos animales?.
Para responder estas preguntas Santa Marta Al Día buscó la opinión de un abogado animalista, quien nos aclaró varios interrogantes sobre este tema.
De acuerdo con Lorenzo Bonilla, los responsables de este atroz crimen pueden ser condenados a cuatro años de cárcel y una sanciones monetarias que superan los 30 millones de pesos.
“La justicia Colombia contempla una condena de cuatro años de presión para el maltrato animal y más cuando estas especies están en vía de extinción. La Fiscalía General de La Nación debe recoger todo el material probatorio y demás elementos para sancionar a los responsables”, explicó Bonilla.
Asimismo, se refirió a las sanciones monetarias y disciplinarias que rodean este delito.
“Son alrededor de 39 millones de pesos, ya que es una condena excarcelable, es decir, que permite que la persona que se encuentre inmersa en un proceso esté en libertad mientras transcurre el proceso. Entre las sanciones disciplinarias están las restricciones sobre el no salir de la ciudad, que se le prohiba trabajar con animales y no poder trabajar como servidor publico”, puntualizo el especialista.
El llamado que hace el abogado es que se realice una investigación profunda sobre motivos, hechos y circunstancia del crimen. A demás los trabajos de concientización por parte de las autoridades ambientales de la zona sobre el cuidado que se debe tener con estos animales.
“Rechazamos el actuar de algunas personas sobre estas especies y necesitamos que todos los entes de control estén en el lugar, sabemos que Corpamag esta realizando su investigación, pero es necesario que la Fiscalía este trabajando mancomunadamente para arrojar resultados contundentes y judicializar a los responsables”.
Por último, Lorenzo Bonilla afirmó que no es la primera vez que sucede esto en la Ciénaga Grande de Santa Marta, en anteriores ocasiones han muerto en manos de personas especies como tiburones martillos, pez espadas entre otras, lo cual es lamentable para el crecimiento del ecosistema marino de esta importarte zona ambiental del Magdalena.
“Estaremos pendiente de este proceso y que el crimen de Julieta no sea una estadística más, sino que se haga justicia y se realicen acciones concientizar a los habitantes de este sector sobre la importancia de conservar el medio ambiente”, dijo el abogado.